A fuego lento, muy lento. Así se coció el visto bueno de los inspectores del Banco de España (BdE) a las provisiones de 9.000 millones que Rodrigo Rato preparaba a finales de 2010 para cubrir posibles pérdidas por el ladrillo. En concreto, el equipo de inspección tardó cuatro meses en dar el visto bueno en el informe de inspección, una vez que éste tuvo que ser modificado a petición de Pedro Comin, jefe del departamento de inspección del BdE en Bankia.
El exdirectivo del Banco de España ha explicado en su declaración en la Audiencia Nacional por la salida a bolsa de Bankia, que en marzo de 2011, ya con el informe de inspección relativo a diciembre de 2010, el director del grupo, Pedro González, le pidió una conclusión sobre el dinero que Bankia tenía previsto provisionar. Una petición que el propio Comin trasladó al equipo de inspección liderado por José Antonio Casaus y José Antonio Delgado.
Según ha contado el propio Comin, éstos concluyeron que con las provisiones previstas por Bankia se cubrían los riesgos de dos años. Sin embargo, Casaus aseguró en su comparecencia que fue “un error” y que lo hicieron ante la exigencia de sus jefes, quienes les pidieron “poner algo que no comprometiera mucho”.
¿Cómo es posible que esa validación de los números no llegara hasta el nueve de junio? Pues según Comin “por la carga de trabajo” que tenían los inspectores, aunque ha insistido una y otra vez ante las preguntas de la fiscalía en que él ya no recordaba el párrafo de validación de dichas provisiones.
Precisamente fue Comin el receptor de los emails internos enviados por el inspector Casaus alertando de que el grupo BFA necesitaba unos saneamientos totales de 16.000 millones de euros. Unos cálculos que fueron descalificados por González este lunes, y a los que también ha restado importancia el jefe del departamento. “Eran muy básicos”, ha dicho, para explicar a continuación que “no tenían la calidad suficiente” para ser tenidos en cuenta en la inspección.
El responsable del Banco de España va un paso más allá para asegurar que “nunca miré los cálculos” elaborados por Casaus. De hecho, ha explicado que ese tipo de ejercicios -de estrés- ya se efectuaban por el regulador para todas las entidades de forma que sus resultados fueran homogéneos. Eso sí, ha insistido en que las cuentas de Casaus “tenían mucho mérito”, ya que era carga de trabajo adicional.
Noticias relacionadas
- Bankia entregará al Estado 219 millones de euros en concepto de dividendos
- Responsables del Banco de España y la CNMV declaran esta semana como testigos en el caso Bankia
- El superior del inspector Casaus desacredita sus avisos sobre Caja Madrid por ser "opiniones"
- El Banco de España ve “sensato y natural” que ‘Goiri’ duplicara los saneamientos de Bankia