A la hora de viajar, es tan importante el destino como el medio de transporte en el que se viaja... y el asiento. Los hay que buscan pasillo y otros ventanilla. Sin embargo, hay una serie de filas que la mayoría de ciudadanos de todo el mundo prefieren antes que las demás. 

Según un informe elaborado por la plataforma de gestión de viajes CWT, dos tercios de los viajeros de negocios prefieren viajar en los asientos del lado de la ventana. Una cifra que aumenta hasta el 71% en el caso de los habitantes de Asia Pacífico y que desciende al 59% en los americanos. En el caso de los europeos, el 65% prefieren estos asientos al pasillo. 

Esta predilección por estos asientos de ventanilla tiene una razón, y es que a estas personas "les gusta tener el control", según declaró la doctora Becky Spelman, psicóloga jefe de la clínica privada de Terapia de Harley Street en una entrevista a The Telegraph. Además, este tipo de personas se irritan con más facilidad y tienden a ser más egoístas. 

Por la contra, aquellos que prefieren el pasillo son "de naturaleza más reservada y más considerados con los demás", apunta la psicóloga. Son personas "a menudo más sociales" y más "abiertos". 

Otras preferencias de los viajeros

A la hora de viajar, los pasajeros tienen claras sus preferencias además de la predilección por la ventanilla. La primera es disponer de un asiento cómodo. Según una encuesta realizada por la compañía Skycop, el 72% de los viajeros prefieren disponer de un asiento confortable frente a tener más espacio para los pies. 

La otra hace referencia a los diferentes problemas con los que se pueden encontrar los pasajeros a la hora de viajar. Y es que esta misma encuesta demuestra que una estrecha mayoría de viajeros de todo el mundo prefieren perder su vuelo antes que su equipaje. 

En definitiva, hay gustos y preferencias para todo tipo de personas. Estas prioridades incluso permiten conocer el carácter de las personas. Y es que, hay gente maniática que si no viaja bajo las condiciones que les gustan, no lo disfrutan igual. Aunque el viaje dure apenas una hora.