España registró la segunda mayor subida del precio de la electricidad en toda la Unión Europea en el segundo semestre de 2018, con un incremento del 13,8% con respecto al mismo periodo del año anterior, para alcanzar los 24,8 euros por cada 100 kilovatios hora (kWh), según los datos publicados este martes por Eurostat.
El único país con un crecimiento superior es Chipre, cuyo precio de la electricidad se disparó casi un 20% en la segunda mitad del año pasado. Países Bajos, por su parte, registró un aumento del 9,7% y Reino Unido del 8,6%. En cambio, Letonia (-4,5%), Polonia (-2,5%), Alemania (-1,6%) y Lituania (-0,9%) fueron los únicos con descensos.
Además, España repite como el quinto país del bloque comunitario con el precio de la electricidad más elevado, sólo superado por Dinamarca (31,2 euros), Alemania (30 euros), Bélgica (29,4 euros) e Irlanda (25,4 euros). Los más baratos son Bulgaria (10,1 euros), Lituania (11 euros) y Hungría (11,2 euros).
Sin embargo, eliminando las diferencias en el nivel de precios entre los socios comunitarios, España sería el tercer país con la electricidad más cara, con 27,4 unidades de poder de paridad adquisitivo (PPA), por detrás de Portugal (28,2 PPA) y Alemania (28 PPA). Con este cálculo, los países con la electricidad más barata serían Finlandia (13,7 PPA), Luxemburgo (13,8 PPA) y Países Bajos (15,2 PPA).
Dinamarca (64%), Portugal (55%) y Alemania (54%) son los Estados miembros en los que los impuestos y las tasas representan una mayor proporción en el precio de la electricidad. La media comunitaria se sitúa en el 37% y en España es del 21%.
Con respecto al gas, España fue el cuarto país de la UE con los precios más altos (8,8 euros por 100 kWh) tras observarse un incremento del 1,2% en el segundo semestre de 2018. Sólo los hogares de Suecia (12,2 euros), Italia (9,5 euros) y Dinamarca (9,1 euros) pagan un precio superior por el gas.
Suecia, de hecho, repite como el país con el precio más caro del gas si se elimina el factor del nivel de precios (10,1 PPA), seguido de España (9,7 PPA), Italia y Portugal (ambos 9,6 PPA). Los socios comunitarios más baratos en este ámbito son Luxemburgo (3,5 PPA), Reino Unido (4,7 PPA) y Croacia y Estonia (5,6 PPA).
A nivel general, el precio medio de la electricidad en el conjunto de la UE creció un 3,5% hasta los 21,1 euros por 100 kWh entre la segunda mitad de 2017 y la segunda mitad de 2018. El aumento del precio del gas fue del 5,7% y llegó a los 6,7 euros por 100 kWh.