Fitch Ratings ha mejorado la calificación de la deuda a corto plazo de Telefónica a 'F2' desde 'F3' dejando de estar "bajo observación" (Under Criteria Observation), mientras que ha mantenido la deuda de largo plazo en 'BBB' con "perspectiva estable". En su último informe publicado este martes, la firma de inversión ha revisado sus criterios reflejando una positiva valoración de la operadora española.
Un verdadero espaldarazo para Telefónica que vivió un infierno bursátil en verano con su acción en mínimos históricos, por primera vez por debajo de los seis euros. Al cierre del lunes, se aupaba por encima de los siete euros, el mejor dato desde finales de julio. Tras conocerse este informe la compañía ha mejorado levemente en la Bolsa de Madrid.
Fitch destaca que la mejora de la calificación de la deuda de Telefónica está basada en su "fuerte liquidez y en la capacidad de la compañía "para satisfacer las necesidades de refinanciación a corto plazo". "Las calificaciones de Telefónica están respaldadas por su cartera diversificada y respaldada por su posición predominante en España".
Hace un mes se conoció que Telefónica fue la empresa no financiera española con más nivel de caja en 2018, con 8.540 millones de euros, según un informe de Moody's para Europa, Oriente Medio y África.
Diversificación de los negocios
Fitch también agrega que "la diversificación de negocios y la naturaleza regional de las telecomunicaciones proporcionan elementos para mitigar las crisis cíclicas". "El flujo de caja de Telefónica es uno de los más diversificados entre los grandes operadores de telecomunicaciones de Europa", han dicho.
España representa el 38,1% del flujo de caja operativo reportado en 2018 por Telefónica, Latinoamérica representa un 39,5% adicional, mientras que Alemania significa otro 10,4% y el Reino Unido un 11,9%. Dicha diversificación aporta estabilidad en el caso de que se produzca una recesión en cualquier región, dice Fitch. "Si bien la creciente correlación entre las economías mundiales reduce estos beneficios, las tendencias de telecomunicaciones continúan evolucionando a nivel nacional", indican.
En cuanto a los riesgos, destacan que el coste de los derechos del fútbol en España, "crea una presión marginal", aunque el tamaño de Telefónica asegura que esta situación sea manejable. Como activo de la empresa, Fitch destaca la amplia red de fibra en España, sus infraestructuras en el resto de Europa y su posición privilegiada en la compra y producción de contenidos.
Impacto de Latinoamérica
En relación al impacto de Latinoamérica indica que "estos mercados muestran un buen crecimiento orgánico y representan negocios en una etapa diferente de evolución". En cuanto a la inversión en la compra de espectro de 5G (4.600 millones de euros en los últimos cinco años) Fitch ve estos costes como un gasto subyacente para el negocio y cree que son importantes para que "los operadores mantengan participaciones de espectro competitivas en sus respectivos mercados".
La firma también ve como un elemento positivo el reciente anuncio de vender hasta 50.000 torres mediante Telxius. "La desconsolidación de este negocio reduce el Ebitda y aumenta la capitalización de gastos de arrendamiento operativo, compensando cualquier cambio en la deuda neta y los recibos de dividendos y ahorros de capital", indican.
Es la opinión de Fitch la gestión de la compañía muestra un enfoque medido de la política financiera y "creemos que se logrará un desapalancamiento en los próximos cuatro años".