La CEOE insta a PSOE y PP a "consensuar" reformas y exige un Gobierno con "ortodoxia" económica
El presidente de la patronal, Antonio Garamendi, cree que los políticos están instalados en el día de la marmota y deben salir de él.
11 noviembre, 2019 12:54Noticias relacionadas
La patronal CEOE está preocupada por el panorama que han dejado las elecciones de este domingo en el Congreso de los Diputados. Una mayor fragmentación política que hace más complicada todavía la gobernabilidad. Es por ello que su presidente, Antonio Garamendi, reclama a los grandes partidos que se sienten a negociar las reformas que necesita el país.
En conversación con EL ESPAÑOL, el líder de los empresarios ha explicado que "los partidos "con opción de gobierno (PSOE y PP) deben consensuar" cambios en materia de pensiones, mercado de trabajo, industria o formación. Es decir, aquellas cuestiones que serán las que hagan que el país pueda seguir avanzando.
Garamendi considera que para lograr ese objetivo se necesita "una opción de gobernabilidad" que apueste por "el rigor y la ortodoxia económica". Aunque no entra a comentar siglas, sí que reclama una "transversalidad" entre distintas formaciones políticas como ocurre en otros países como Alemania.
"No sólo los empresarios estamos pendientes" de las reformas que se necesitan, insiste. Para el líder de CEOE también los ciudadanos muestran sus preocupaciones. Las dudas en materia económica "pasan factura con las inversiones, pero también se dejan sentir en el ahorro porque la gente no se fía de lo que pueda ocurrir".
Garamendi, que ha hablado con este diario minutos antes de volar hacia Cuba con el Rey Felipe VI, ha pedido "cautela" a la hora de aplicar recetas económicas. "En momentos de crecimiento los cambios tardan en notarse, pero cuando se hace en momentos de desaceleración su efecto se deja sentir en minutos", concluye.
Derecho a la propiedad
Las palabras del presidente de los empresarios van en la línea de las que pronunciaba la semana pasada en el XVIII Congreso de directivos CEDE en donde pedía a los políticos "sentarse y empezar a hablar de las cosas del comer", de forma que el 10-N sirviera como desbloqueo a la situación política del país.
En ese auditorio instaba también a que "se respete el derecho a la propiedad, algo contra lo que atacan los populismos".