Las empresas españolas han invertido un total de 1.246 millones de euros en proyectos de responsabilidad social durante el año 2018. Este dato representa un crecimiento de 400 millones de euros, respecto de los 846 millones invertidos un año antes. Los datos del VI edición del Informe SERES-Deloitte presentado este martes indican además que se realizaron 14.648 proyectos durante el ejercicio anterior, 5.625 más que en 2017.
El informe elaborado por la Fundación SERES y Deloitte mide el impacto y la contribución real de las empresas a la sociedad a través de un modelo de análisis desarrollado por la firma. La Fundación SERES reúne a casi todas las empresas del Ibex y, por tanto, refleja los esfuerzos en responsabilidad social empresarial (RSE) de las compañías de mayor facturación de España.
Los datos contenidos en el documento -analizando a 76 grandes compañías- reflejan además que las empresas españolas mejoraron sus indicadores de responsabilidad social en todos sus métricas. Aumentó la inversión, el número de proyectos, las personas favorecidas y el número de empleos afectados.
El año pasado, los 1.246 millones de euros invertidos beneficiaron a 55 millones de personas, siendo 33 millones los beneficiarios directos. En 2017, dicha inversión favoreció a 32,7 millones de personas, de las cuales, más de 24 millones fueron beneficiarios directos. El crecimiento en este último indicador ha sido casi del 60% en los dos últimos años.
'Objetivos de Desarrollo Sostenible'
Pero, ¿todas las empresas son sostenibles? El informe indica que el 84% de las empresas analizadas contempla los Objetivos de Desarrollo Sostenible en sus estrategias de RSE. En esta línea, seis de cada diez compañías fomentan el trabajo decente y el crecimiento económico, mejorando la calidad de vida de sus trabajadores y de su entorno.
Francisco Román, presidente de la Fundación SERES, ha declarado en la presentación del informe que la existencia de este informe "es una clara muestra de la contribución social de las empresas, y como de manera tangible puede medirse la sostenibilidad, responsabilidad y compromiso. Algo que además de derivar en rentabilidad, genera progresivamente una huella positiva hacia el futuro”. Román ha destacado que hacer responsabilidad social empresarial es rentable y que las empresas cada vez tienen más conciencia de ello.
Por su parte, Fernando Ruiz, presidente de Deloitte, ha afirmado que “estamos inmersos en una etapa crucial en la que el ritmo de las transformaciones nos exige reacciones rápidas, pero también nos exige no perder la perspectiva. Una perspectiva que, precisamente, nos la proporciona informes como este, con elementos de análisis que nos permiten conocer en qué se traducen nuestras aportaciones a la sociedad y cuáles deben ser las bases de nuestro compromiso.”
Por áreas de actuación, las empresas han orientado sus proyectos, principalmente, a la cobertura de bienestar y necesidades sociales (educación, salud, financiación y fortalecimiento a entidades y cooperación al desarrollo), llegando a 5.727 iniciativas en esta área. El otro ámbito de acción es el de empleo e integración laboral, donde se llevaron a cabo 2.059 proyectos.
Igualdad de género
Las iniciativas relacionadas con el ámbito social siguen incrementando. El 74% de estos proyectos realizados por las empresas analizadas han sido en el ámbito del bienestar y la cobertura de necesidades sociales, destacando especialmente su preocupación por ámbitos como la educación, la salud y el bienestar social.
Del mismo modo, el 61% de las empresas trabaja por avanzar en asuntos sobre igualdad de género y el 49% de las compañías trabaja activamente en la producción y consumo responsable, en acciones por el cuidado del clima y en el desarrollo de alianzas para lograr los objetivos propuestos.
Esta edición refleja que se mantiene la participación de trabajadores en el desarrollo de proyectos de RSE, llegando a 219.080 empleados, lo que supone el 13% de sus plantillas. Un dato que sin embargo está por debajo de 2017 cuando 300.478 empleados se involucraron activamente en iniciativas relacionadas con la RSE.
Metodología del informe
En línea con la cuota de reserva de puestos establecida en la Ley General de Personas con discapacidad, el 86% de las empresas analizadas integra personas con discapacidad en su plantilla. El volumen de personas integradas laboralmente a finales del año pasado llegó a 150.782, siendo 53.101 de estas personas integradas en las plantillas propias de las empresas.
El modelo de contribución social y económica utilizado para obtener estas conclusiones (Global Impact Model) desarrollado por Deloitte, permite evaluar la concordancia entre los objetivos de RSE de las empresas y su actividad. Para realizarlo, se han tenido en cuenta cinco parámetros: el capital persona, organizacional, relacional, económico y social, además de 16 ejes de contribución y 138 indicadores previamente definidos.