El sector de los juegos de azar es uno de los grandes damnificados del estado de alarma decretado por el Gobierno el pasado sábado por la noche. El confinamiento establecido por el Ejecutivo para frenar la propagación del coronavirus prohíbe la apertura de cualquier establecimiento de apuestas y bloquea todos los terminales físicos de juegos de azar.
En la práctica, esto significa que mientras dure el estado de alarma no podrá estar abierta ninguna casa de apuestas, ni quiosco de la la ONCE, ni podrá trabajar ningún vendedor de cupones. Fuentes del sector indican a Invertia que también se ha paralizado toda la venta de cupones de Lotería y de la Once.
En estos momentos, sólo se vende el Euromillón, porque es de potestad europea limitarlo, y en Internet solo se venden cupones de rasca virtuales y se realizan apuestas de deportes que no se hayan cancelado por el coronavirus. Una situación que deja al sector al límite.
También un inesperado disgusto para el Ministerio de Hacienda. La Sociedad Estatal de Loterías y Apuestas del Estado (Selae) es la empresa de SEPI más rentable con 9.000 millones de euros de facturación anual y un beneficio total de unos 2.400 millones.
Una compañía que queda totalmente paralizada con la actual situación de emergencia. El Anuario del Juego en España 2019 y los datos de la Dirección General de la Ordenación del Juego coinciden en señalar que el margen de Loterías del Estado es superior a los 3.200 millones al año.
Impacto de la Lotería de Navidad
Estamos hablando del dinero que le queda a la empresa después de restar el pago de premios. Si le restamos los costes operativos, financieros e impuestos, el beneficio supera los 2.400 millones, un montante que va a parar íntegro al Estado.
En este caso, el margen que queda para el Gobierno es de unos 266 millones de euros al mes. De esta manera, si se paraliza la actividad durante al menos treinta días, que es la estimación más optimista que se hace de la duración de la crisis, Loterías y el fisco dejarían de recibir más de 250 millones.
Incluso si excluimos el impacto de la Lotería de Navidad que no debería verse afectada por la prohibición -ya que su venta se hace a final de año- tendríamos un impacto de 202 millones de euros. Según Loterías, el 24% de su margen llega por los cupones de su juego estrella.
Once y Codere
Pero Loterías no será la única afectada. La ONCE tiene un margen superior a los 1.000 millones de euros, por lo que su impacto en la facturación sin un mes de actividad sería cercano a los cien millones.
Por su parte, la suspensión de todas las competiciones deportivas y las restricciones de circulación de personas en todo el mundo ha puesto en una posición muy complicada a la empresa de juego y de apuestas Codere. La compañía ha sufrido restricciones en España, Italia, Argentina, Panamá y Uruguay.
En este sentido, y teniendo en cuenta posibles nuevas restricciones al funcionamiento normal de su negocio, ha puesto en marcha un plan de contingencia con objeto de mantener su posición de liquidez y "garantizar la continuidad del negocio".
Según se comunicó este lunes a la CNMV, el plan se aplicará en las próximas semanas hasta que se reviertan dichas medidas. Entre las medidas más destacadas se encuentra la firma de un préstamo el pasado 13 de marzo por 500 millones de pesos en México (20 millones de euros), con vencimiento de 2025.