El laboratorio estadounidense Pfizer registró un beneficio neto atribuido de 3.426 millones de dólares (2.919 millones de euros) en el segundo trimestre de 2020, lo que se corresponde con una contracción del 32% en comparación con el mismo periodo del ejercicio anterior, según las cuentas publicadas este martes por la empresa.
"Nuestro sólido rendimiento durante la primera mitad del año subraya la resiliencia de nuestro negocio incluso durante los tiempos más desafiantes", ha asegurado el presidente y consejero delegado de Pfizer, Albert Bourla.
La facturación alcanzó los 11.801 millones de dólares (10.067 millones de euros) entre abril y junio, un 11% menos. Por segmentos de negocio, el alza del 4% en la división de productos biofarmacéuticos, hasta 9.795 millones de dólares (8.356 millones de euros), no pudo compensar la caída del 32%, hasta 2.006 millones de dólares (1.711 millones de euros), en Upjohn, su filial de genéricos.
Asimismo, la cifra de negocios del segundo trimestre de 2019 también se vio afectada por la escisión de su negocio de medicamentos sin receta para crear una 'joint venture' con GSK. Hace un año, esa división facturó 862 millones de dólares (735 millones de euros).
En el trimestre, los costes asociados a las ventas cayeron un 11%, hasta 2.281 millones de dólares (1.946 millones de euros), mientras que los gastos de venta, administrativos y de información experimentaron un retroceso del 14%, hasta 3.030 millones de dólares (2.585 millones de euros). La partida de investigación y desarrollo (I+D) se elevó un 16%, hasta 2.132 millones de dólares (1.820 millones de euros).
En el conjunto de los primeros seis meses del año, el beneficio neto atribuido de Pfizer se contrajo un 24%, hasta 6.828 millones de dólares (5.828 millones de euros). De su lado, los ingresos netos durante el semestre alcanzaron los 23.839 millones de dólares (20.348 millones de euros), un 10% menos.