Este atípico mes de abril pasado dejamos de sentir el sofocante calor en el Real de la Feria, el sonido de las sevillanas se cambiaron por las ruedas de prensa de Fernando Simón y las botellas de manzanilla se sustituyeron por las de gel hidroalcohólico. La cancelación de ferias y fiestas populares en Andalucía trajo suspiros para la sociedad y para toda la industria auxiliar, también para el sector viñedo.

La nueva normalidad ha cambiado nuestro día a día pero las tradicionales empresas no han desaparecido por el camino, incluso han salido reforzadas. Es el caso de Bodegas Barbadillo y el Grupo Osborne, referentes en el sector de las bodegas y los viñedos, desde la provincia de Cádiz al mundo.

Ambas empresas, que superan los cien años de vida, coinciden en sus puntos durante la pandemia: el cierre del canal Horeca y el auge del comercio online. Víctor Manuel Vélez, director general de Bodegas Barbadillo, atiende a Invertia y analiza el camino de la compañía en la crisis sanitaria del Covid-19, una de las etapas “más difíciles” que han pasado en la empresa sanluqueña.

Sin embargo, el refrán reza que cuando una puerta se cierra, otra se abre. El dicho se ha escenificado en Barbadillo: se han mantenido las ventas en alimentación y exportación mientras se ha impulsado el ecommerce.

"Las ventas cayeron un 40% durante el confinamiento debido al cierre de la hostelería", reconoce Vélez mientras destaca el milagro de los panes y los peces. Las ventas online se han incrementado en un 956%. La tradicional bodega partía de una base pequeña: en 2019 su negocio online supuso el 1% de las ventas en volumen.

Aumento del 100% del ecommerce

La directora de Comunicación de Osborne, Rocío Osborne, analiza con Invertia una radiografía similar en sus bodegas. "El 45% de la facturación viene de la hostelería que ha estado parada y, durante el confinamiento, compensamos en parte con una subida de entre el 15% y el 20% en el canal de alimentación y aumentos del más del 100% en nuestra tienda online".

Pese al auge online, las limitaciones en hostelería y la falta de turismo hacen más lenta esta recuperación del sector de hostelería. Como consecuencia de la crisis sanitaria, Osborne adaptó su producción para salvaguardar la salud y seguridad de sus empleados. Con ello, limitó el ERTE exclusivamente al colectivo que trabaja en sus restaurantes.

A todo ello se sumó la creación de un comité de crisis para el seguimiento de la situación y la toma de decisiones ágiles según iba cambiando la situación. "Hemos mantenido una comunicación permanente con los empleados que se ha reforzado, implementando medidas de eficiencia y proyectos de digitalización que ya estaban en marcha", añade Osborne.

Venta online y más alianzas

En Barbadillo, la estrategia comercial pasa ahora por reforzar el ecommerce para compensar las pérdidas del canal hostelería. "Los indicadores macroeconómicos no auguran un buen 2020 para el conjunto de la economía española. Siendo consciente de ello, Barbadillo contempla oportunidades en la hipersegmentación que ahora mismo vive la distribución del vino", detalla el director general de Bodegas Barbadillo.

"Canales como el online con sus portales verticales de venta de vino, portales generalistas y el ecommerce propio son territorios que tienen mucho recorrido a nivel de ventas y fidelización". En este sentido, desde Barbadillo han hecho una firme apuesta por renovar su tienda online y su figura digital.

En el caso de Osborne, ponen el foco en el crecimiento inorgánico que se acelerará en los próximos meses. "Creemos que puede hacer oportunidades en diferentes categorías", dice la directora de comunicación mientras no descarta intensificar alianzas con otras firmas, por ejemplo, para la distribución de marcas extranjeras en España.

"Seguimos trabajando en la internacionalización de nuestras marcas, algunas de ellas muy bien posicionadas en mercados como el asiático, Norte América y Europa. Tenemos muy claro que el desarrollo de los mercados internacionales va a ser clave para afrontar esta crisis", ha expresado.

Barbadillo y Osborne durante la pandemia

Para salvar a los sectores más desfavorecidos, Barbadillo donó el sector hostelero sevillano, afectado por la cancelación de la Feria de Abril, unas 6.000 botellas de Manzanilla Solear, el equivalente a los 1.000 packs del feriante que preparamos como edición limitada

La bodega también ha participado en la iniciativa #FuerzaBar de apoyo a la hostelería, promovida por Cruzcampo y Amstel, con la donación de 10.000 copas de manzanilla Mil Pesetas. A todo ello se suma su colaboración con Cáritas Sanlúcar de Barrameda con un donativo para la compra de una furgoneta para el transporte de alimentos a familias afectadas por la Covid.

Junto a estas acciones, la participación en la iniciativa 'https://juntossaldremos.com/' para apoyar a Cruz Roja frente a la Covid-19 y la donación de una botella de Manzanilla Pastora Pasada en Rama a ‘#wineagainstcorona’. Bodega Pirineos, bodega que posee Barbadillo en el Somontano, se ha unido a la ‘Plataforma 0,19’, una iniciativa impulsada por Ámbar, junto a Fundación Ibercaja, Ibercaja Banco y las Asociaciones Profesionales de Hostelería y Turismo de Aragón.

Por su parte, la Fundación Osborne durante todo este tiempo ha estado impulsando la formación online creando una serie de contenidos audiovisuales para dar formación a Escuelas de hostelería. Con ello, ha querido a apoyar a la formación continuada de los jóvenes produciendo y compartiendo en su página web encuentros audiovisuales vinculados al mundo de la gastronomía y la hostelería.

Recientemente también ha realizado una subasta solidaria con Subastas Durán en la que pusimos a la venta las joyas de Osborne más preciadas para ayudar a las personas más vulnerables de esta crisis en las comunidades donde está presente con centros de actividad (Cádiz, Huelva, Ciudad Real y La Rioja).

Una vida entre bodegas

Dedicada a las bodegas y los viñedos, el Grupo Barbadillo cuenta con 212 empleados incluyendo Bodega Pirineos (Huesca) y Bodegas y Viñedos Vega Real (Valladolid). Alcanza una cifra de negocio de 33,5 millones de euros y está presente en España, Estados Unidos y Reino Unido, entre otros. Esta expansión es posible gracias a su trabajo desde 1821 al acumular seis generaciones entre sus filas.

Osborne, con 250 años de historia, quiere perdurar su apuesta por la autenticidad y la maestría, con un espíritu visionario y con compromiso canalizado a través de la Fundación Osborne. En 2019, el grupo facturó más de 222 millones de euros, un 2% más que en el año anterior.

Con más de 1.000 empleados, entre sus marcas estratégicas figuran Nordés, Cinco Jotas, Carlos I y Montecillo, a las que se han sumado al porfolio nuevas marcas de terceros como Disaronno, Tía María, el bourbon Evan Williams y el champagne Piper Heidsieck.