Más de 300.000 empresas españolas mantienen un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) y en torno a 450.000 pymes precisan de más financiación para no colapsar, de las que unas 130.000 estarían a las puertas de presentar concurso de acreedores si no reciben antes ayudas.
Así se desprende del barómetro realizado en los primeros días de marzo por el Consejo General de Colegios de Gestores Administrativos entre sus 6.000 colegiados, que pide al Gobierno que no demore más aprobar las medidas para salvar a los negocios del "abismo".
El barómetro refleja que aún permanecen en ERTE más de 300.000 empresas, de las que 113.000 cuentan con un aval del ICO, frente a las 225.000 pymes que han formalizado operaciones avaladas por la línea ICO Covid-19 y que en este momento no se encuentra en ERTE.
Ampliación de plazos
De acuerdo con los datos facilitados por los gestores administrativos, al menos el 60% de las operaciones formalizadas por las pymes que actualmente están en ERTE deberán acogerse a la ampliación de plazos aprobada por el Gobierno.
En cuanto a los préstamos avalados por ICO para las pymes que no están actualmente en ERTE, van a solicitar ampliación de plazos el 50% de las empresas, según el análisis, que también revela que todas las empresas que siguen en ERTE necesitan más financiación para sobrevivir.
Concretamente, de las pymes que cuentan con alguna operación ICO y no están en ERTE, 124.000 precisan nueva financiación para sobrevivir, al tiempo que de las pymes que no han solicitado aún operaciones avaladas por ICO o que no se lo concedieron, 214.000 precisan ya acceder a financiación para asegurar su futuro.
Por otro lado, el 6% de las pymes no están pudiendo en la actualidad atender sus compromisos de pago. Además, en torno a 130.000 pymes estarían esperando a presentar concurso de acreedores de no existir la moratoria concursal.
"Esperemos no llegar a esta situación", afirma el presidente de los Gestores Administrativos, Fernando Santiago, que explica que esta "sorprendente" cifra va a responder tanto a concursos como a desapariciones directas y subraya que "las empresas están esperando una decisión que les permita sobrevivir y por eso aguantan más de lo que pueden".s", ha enfatizado.