Google ha advertido a sus empleados de que podría despedirlos si no se vacunan contra la Covid-19. Así lo ha transmitido el gigante tecnológico a través de un comunicado interno en el que insta a sus trabajadores a inocularse ambas dosis de la vacuna antes del 18 de enero del próximo año.
De no cumplirse el requisito llegada dicha fecha, la compañía ha enumerado una lista de sanciones para las personas que continúen con la negativa de inmunizarse. Primero, serán puestos en una baja remunerada durante 30 días. Después, la empresa les dará una baja sin remunerar durante un máximo de seis meses, seguida de un despido.
"Cualquier persona que entre en un edificio de Google debe estar completamente vacunada o tener una adaptación aprobada que le permita trabajar o acudir a las instalaciones", dijo la compañía, añadiendo que "las pruebas frecuentes no son una alternativa válida a la vacunación", señalaba el comunicado al que ha tenido acceso la CNBC.
Un portavoz oficial de Google ha declarado a EL ESPAÑOL que la compañía cree "firmemente que nuestros requisitos de vacunación son una de las formas más importantes de mantener la seguridad de nuestra plantilla y el funcionamiento de nuestros servicios. Nos comprometemos a hacer todo lo posible para ayudar a nuestros empleados a que puedan vacunarse", admiten desde la entidad.
El gobierno estadounidense había dado forma a un mandato en el que pedía a las empresas de más de 100 trabajadores que se asegurasen de que sus empleados contaban con la pauta completa de vacunación, o que se sometiesen a pruebas periódicas de la Covid antes del 18 de enero. Un tribunal federal emitió la suspensión de dicha orden, por lo que su implementación en el terreno estadounidense ha quedado paralizada.
En Estados Unidos, Google está cumpliendo con la Orden Ejecutiva del presidente Biden que exige la vacunación de la Covid-19 a los empleados de los contratistas federales. Cuando la legislación local obliga a ello, se exige la vacunación a todas las personas que acuden a sus oficinas.
Google ha pedido a sus empleados que muestren su certificado de vacunación para que quede registrado en los sistemas internos de la compañía, tanto si tienen previsto acudir a la oficina como si no. No son los únicos.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, anunció a principios de mes que todos los trabajadores del sector privado deberán vacunarse, una medida que el mandatario ha descrito como "preventiva" para frenar la nueva ola de contagios de la Covid y la transmisión de la nueva variante ómicron del virus.
La medida entrará en vigor el 27 de diciembre. "Ómicron está aquí, y parece que es muy transmisible", señaló en una entrevista en la cadena televisiva MSNBC.
800.000 muertes por Covid
Estados Unidos es el país más afectado por la Covid-19 en el mundo, superando este martes los 800.000 muertos por la pandemia, según los datos de la Universidad Johns Hopkins. Esta cifra de fallecidos se produce horas después de que Estados Unidos rebasara los 50 millones de contagios desde el inicio de la pandemia.
California es el estado más golpeado por la pandemia con 75.599 muertos, seguido por Texas (74.959), Florida (62.073), Nueva York (57.724), Pensilvania (34.731), Illinois (29.985) y Georgia (29.735). En cuanto a contagios, California suma 5,8 millones, le sigue Texas con 4,39 millones, tercero es Florida con 3,72 millones y Nueva York es cuarto con 2,86 millones.
Por países, EE.UU. sigue siendo el país más afectado con 50 millones de infecciones, seguido de India (34,7 millones) y Brasil (22 millones). La campaña de vacunación se ha acelerado en los últimos meses en el país, donde el 72,2 % de la población ha recibido ya la primera dosis, el 61 % está completamente inmunizado, y al 27,2 % se le ha administrado la dosis de refuerzo, de acuerdo a cifras de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés).
La variante ómicron de la Covid-19 parece no causar una enfermedad tan grave como se temía, a pesar de ser más contagiosa, pero su expansión a nivel global ya ha afectado a la economía y los temores a nuevas medidas restrictivas están afectando al mercado.
Esta variante, que se ha extendido a unos 40 países, fue detectada por primera vez en EE.UU. el pasado 1 de diciembre y, desde entonces, las autoridades sanitarias de cada estado han ido contabilizando sus propios casos de ómicron.