Gran Vía quiere plantarle cara a las grandes cerveceras y abrirse un hueco en el mercado nacional. Parte de la desventaja de ser andaluza, y en su tierra natal tiene difícil hacerle la competencia a la tan arraigada Cruzcampo. Por el momento, en poco más de un año de vida, ha conseguido alcanzar más de 1.000 puntos de venta. 

La estrategia es clara: apostar por las marcas de proximidad. Están en el mercado las marcas de Giralda en Sevilla, La Malagueña en Málaga, Malvarrosa en Levante y Mare Nostrum en Cataluña, entre otras. "Se han registrado más de 100 marcas de proximidad", explica a EL ESPAÑOL-Invertia Boris de Mesones, el maestro cervecero de Gran Vía.

La cervecera tiene arraigo andaluz, aunque su vocación es crecer por toda España: Andalucía representa el 30% de su facturación; Cataluña y Aragón representan alrededor del 20% de sus cuentas, porcentaje que comparte con la zona del levante y el centro. El norte de España es donde está menos implantada, las ventas allí alcanzan el 10% del total.

La fábrica de Gran Vía en Alcalá de Guadaíra (Sevilla). Gran Vía

Este proyecto arrancó en 2019 tras una inversión de 26 millones. Su fábrica se ubica en el municipio sevillano de Alcalá de Guadaíra y cuenta con 50 empleados directos y unos 200 indirectos. 

La producción de Gran Vía se inició en otoño de 2020 y, a principios de 2021, empezaron con su comercialización. En este breve periodo tiempo de vida, ha causado gran revuelo. Fue denunciada por Heineken (Cruzcampo) por usar sus tiradores en bares sevillanos. 

Recientemente, el juzgado ha archivado la causa, alegando que se emplearon con el ánimo de "poder hacer la prueba" con la cerveza Gran Vía para "servírsela a la clientela".

También ha establecido una alianza con Scalpers. Cuando un cliente adquiere un producto vía online de 'Adrenaline', la marca deportiva de esta firma de moda sevillana, se le hace entrega también de una cerveza sin alcohol. 

Rostros del mundo empresarial

Gran Vía cuenta con algunos rostros conocidos del mundo de la empresa: su presidente es Miguel Velasco, el expresidente de la inmobiliaria Colonial, y su director financiero es Fernando Olalla, quien antes trabajaba para Accenture y Deutsche Bank.

Una cerveza de Gran Vía. Gran Vía

"La fábrica puede tener una capacidad de 20 millones de litros anuales y haciendo las cosas bien, nuestro propósito es llegar a esa producción algún día", explica el maestro cervecero.

Mahou, Damm y Heineken

El pastel cervecero está repartido, fundamentalmente, entre tres grupos: Mahou San Miguel, Grupo Damm y Heineken España. La comunidad autónoma donde más cerveceras hay es Cataluña, con 113, seguida de Andalucía, con 74, y Castilla y León, con 45, según datos del informe socioeconómico del sector de la cerveza en España. 

El grupo de Mahou, San Miguel y Alhambra es la que más producción anual tiene: 10,83 millones de hectolitros. Le sigue de cerca el Grupo Damm, con 9,93 millones de hectolitros.

Un tirador de cerveza.

El tercer grupo que más cerveza produce es Heineken España (8,78 millones). Más allá de la marca Heineken, también son conocidas las de Cruzcampo, Amstel, El Águila o Desperados. 

Algo más alejados están Hijos de Rivera (Estrella Galicia) con una producción anual de 3,46 millones de hectolitros y la compañía cervecera de Canarias (Tropical, Dorada y Corona) con 0,87 y Grupo Ágora, al que pertenece Ambar, con una producción de 0,72.

El tercero de Europa

En España somos muy cerveceros. Los datos lo demuestran: es el tercer país que más zumo de cebada produce de Europa, solo le adelantan Alemania y Polonia. Con una producción de 39,52 millones de hectolitros anuales, ocupa la décima posición mundial.

La lata es el formato preferido por los españoles para consumir la cerveza. El 45% de las que se venden anualmente son consumidas en este formado, seguida por el 38% que está envasada en botellas y el 17%, en barril.