El consejo de Indra cesa a Ignacio Mataix como consejero delegado y pone fin a su crisis de gobernanza
El Consejo de Administración de Indra ha aprobado iniciar un proceso de sucesión de su actual consejero delegado, Ignacio Mataix.
6 marzo, 2023 19:28Indra ha comunicado en la tarde de este lunes la próxima salida de su consejero delegado, Ignacio Mataix, el último ejecutivo que quedaba en el Consejo de Administración del grupo presidido por Fernando Abril-Martorell, sustituido por la Sepi a mediados de 2021.
La compañía presidida por Marc Murtra informa que el Consejo de Administración "ha aprobado por unanimidad iniciar, de común acuerdo con el actual consejero delegado Ignacio Mataix Entero, un proceso de sucesión en el cargo de consejero delegado vinculado a la definición del próximo plan estratégico que la Compañía tiene previsto definir para los próximos años".
Mataix "continuará ejerciendo sus actuales funciones para facilitar el proceso de sucesión y la continuidad en la gestión", explica Indra en su comunicado a la CNMV, "hasta el nombramiento del nuevo consejero delegado, para cuya selección se contará con una consultora independiente".
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El ejecutivo "permanecerá prestando sus servicios a la Compañía como asesor estratégico del Consejo de Administración por un periodo de dos años", ha indicado Indra.
La compañía cierra así la crisis de gobierno corporativo que estalló en la Junta de Accionistas celebrada el pasado mes de junio, cuando fueron cesados los consejeros independientes con el apoyo del primer accionista del grupo (la Sepi, con el 28% del capital) y del presidente del grupo Prisa, Joseph Oughourlian, que posee cerca del 9% del capital de Indra a través del fondo Amber.
La multinacional tecnológica y de defensa española registró en 2022 un beneficio de 172 millones de euros, un 19,9% más, y unos ingresos de 3.851 millones, un 12% más. La cartera de pedidos del grupo superó los 6.300 millones, un 16% más.
La compañía forma parte del consorcio, junto con Airbus y Dassault, que desarrollará el próximo avión de combate europeo, el FCAS, que contempla un presupuesto de unos 100.000 millones de euros en las próximas décadas.
Indra también afronta una posible reestructuración de su negocio próximamente, con una separación de su negocio de defensa del tecnológico, operación que ha analizado en otras ocasiones en el pasado.