La consultora, según ha podido saber este diario, asistirá a la inmobiliaria semipública en operaciones de venta de estos préstamos impagados sin garantía, que al cierre de diciembre del pasado año tenían un valor de unos 850 millones de euros, según las cuentas de Sareb.

Es de suponer que, cuando se produzcan las ventas de las carteras, el importe total que se logre recuperar será inferior a esa cifra.

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En todo caso, se trata de un volumen no muy elevado teniendo en cuenta que el pasado verano Sareb llevó a cabo la venta de una megacartera de unos 3.000 millones de euros, el llamado Proyecto Victoria. El comprador fue Axactor.

Los préstamos impagados que pertenecen a estas carteras se considera que son de difícil cobro, pues quien finalmente se haga con ellos tendrá que ir reclamando a los morosos para intentar recuperar aunque sea parte del dinero prestado.

Falta de recursos

Sareb recurre a esta contratación al considerar que "carece de recursos de personal suficientes" para gestionar estas ventas. Según justifica en la documentación de la contratación, estas carteras generan mucho trabajo de gestión de información.

Además, requieren mucho esfuerzo, dado que, al tratarse de procesos competitivos, es necesario contactar con muchos inversores y darles respuesta de forma constante a sus inquietudes.

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"Sareb no dispone de medios suficientes para desarrollar todo el proceso de venta, ni la valoración estadística de la cartera, y los asesores no sólo disponen de equipos completos dedicados a este tipo de operaciones, sino que tienen amplia experiencia y contacto con los potenciales inversores según la tipología de cada cartera", explica la compañía.

El presupuesto del contrato asciende a unos 375.100 euros (310.000 euros sin contar los impuestos) y tendrá una duración de doce meses.

A la hora de elegir la oferta presentada por PwC, el criterio que más ha pesado ha sido la descripción de la metodología, al que se podían otorgar hasta 30 puntos sobre 100.

La experiencia de la empresa en la venta de este tipo de carteras y los honorarios fijos y variables pesaban, en total, 60 sobre 100 (20 cada criterio), mientras que el retainer fee (la comisión por retención del proveedor) podía conseguir hasta 10 puntos sobre el total. Sareb recibió en total cuatro ofertas.