Las empresas de Elon Musk se frotan las manos con la llegada de Donald Trump: "Ha nacido una estrella"
- Los analistas creen que Tesla o SpaceX se beneficiarán de la victoria de Trump, que podría incluir al multimillonario inversor en su Administración.
- Más información: Trump será el presidente más viejo y el primer delincuente en el cargo: vuelve a La Casa Blanca con todo el poder
"Ha nacido una estrella". Con estas palabras se refería este miércoles Donald Trump a Elon Musk en su primer discurso tras ganar las elecciones en Estados Unidos. El futuro presidente se ha deshecho en elogios hacia el dueño de Tesla, X y Space X, quien se ha convertido en una persona de su máxima confianza y podría terminar desempeñando un papel importante en su próximo mandato.
Elon Musk ha sido uno de los grandes apoyos de Donald Trump durante la campaña electoral. En las últimas semanas, ha participado en varios de los mítines que ha realizado el futuro presidente de EEUU. Entre ellos, el que ofreció el pasado 5 de octubre en Pensilvania, donde sobrevivió a un intento de asesinato en julio y uno de los estados clave en estos comicios.
Pero su apoyo no se ha limitado a participar en actos públicos. Según la prensa estadounidense, el hombre más rico del mundo ha invertido al menos 119 millones de dólares (110,59 millones de euros) en la campaña electoral del líder republicano a través de lo que se conoce como comité de acción política (PAC por sus siglas en inglés).
Y también se cree que Elon Musk se ha convertido en una de las personas cuya opinión más tiene en cuenta Donald Trump. De hecho, se considera que su cercanía con el líder republicano ha influido, entre otras decisiones, en la elección de J.D. Vance como vicepresidente para esta segunda etapa en la Casa Blanca.
La duda reside ahora en hasta qué punto Musk se implicará en el próximo mandato de Trump, más allá de la buena sintonía que existe entre ambos. El propio candidato republicano ha jugado al despite sobre esta posibilidad durante su campaña electoral. Lo mismo descartaba la idea de que formara parte de su gobierno, que le proponía como secretario de "reducción de gastos".
A este respecto, Brian Hughes, asesor de Trump, apuntó que la intención es poner a Musk al frente de una nueva comisión de "eficiencia gubernamental". En un mitin celebrado en Nueva York el 27 de octubre el hombre más rico del mundo aseguró que es posible recortar en al menos 2 billones de dólares (1,86 billones de euros) el presupuesto federal.
De implicarse de forma activa en la nueva Administración, Musk no será el primer empresario que forma parte de un Gobierno de Trump. En la anterior legislatura, ya formaron parte de su equipo personas con una trayectoria profesional muy vinculada a la empresa como Rex Tilleron, ex director ejecutivo de Exxon Mobil, o Linda McMahon, ex directora ejecutiva de World Wrestling Entertainment.
Gran beneficiado
Independientemente de qué ocurra finalmente con Musk en el ámbito político, los analistas y los mercados consideran que el hombre más rico del mundo es uno de los "grandes beneficiados" de la victoria electoral de Donald Trump. De hecho, las acciones de Tesla se disparaban este miércoles más de un 10%, pese a que Trump no es precisamente un defensor de los vehículos eléctricos.
"Los más beneficiados por una victoria de Trump serían Tesla y Musk", aseguran desde Wedbush, una firma estadounidense especializada en empresas tecnológicas. Así, apunta que aunque la presidencia del candidato republicano será negativa en general para el sector de los vehículos cero emisiones, ya que es probable que se supriman las rebajas y los incentivos fiscales a estos, la firma de Musk saldría igualmente ganando.
Estas suposiciones se basan en la enorme escala y alcance que tiene Tesla en el mercado, que ligado a un entorno sin ayudas para los coches eléctricos y unos aranceles chinos probablemente más elevados, llevarían al fabricante estadounidense a liderar las ventas del país.
Pero Tesla se verá también beneficiada por la 'aversión' de Trump a la regulación, especialmente en el entorno tecnológico. Por ejemplo, con el nuevo gobierno podría acelerarse el desarrollo de la conducción autónoma, un negocio por el que Tesla está apostando de forma decidida como demuestra la reciente presentación de su robotaxi Cybercab.
También SpaceX puede verse favorecido por una normativa menos estricta. Musk se ha quejado públicamente de la excesiva regulación y los controles a los que ve sometido su negocio espacial, pese a que la NASA es uno de sus principales clientes. De hecho, por este motivo decidió trasladar gran parte de sus operaciones de California a Texas.
Otro frente en el que ambos multimillonarios mantienen una postura común en contra de una excesiva regulación es el relativo a las criptomonedas. De hecho, estos activos digitales han acogido con fuertes subidas la victoria de Trump y el bitcoin se encuentra en máximos históricos.
Su cercanía con Trump también podría serle de utilidad a Musk a la hora de imponer su postura sobre la inteligencia artificial (IA) en pleno debate global sobre su regulación. Además, no hay que olvida que Musk es dueño xAI y mantiene un enfrentamiento con OpenAI, la empresa que lidera actualmente el desarrollo de la IA generativa y en cuyos orígenes estuvo implicado el empresario.
"Musk claramente tiene una relación cercana con Trump y cualquier comentario que haga tendrá una gran influencia", señal Matt Mittelsteadt, investigador en la Universidad George Mason en declaraciones a Wired. Además, avisa de que "podría llegar a tener algún tipo de posición en una posible administración de Trump, y sus puntos de vista podrían implementarse en políticas".
Puntos de desencuentro
Sin embargo, hay otros aspectos en los que ambos empresarios no están tan de acuerdo y en el que habrá que esperar para comprobar si Elon Musk tiene la capacidad de acercar las posturas de Donald Trump a las suyas. Además de todo lo relativo al vehículo eléctrico, también mantienen posiciones diferenciadas en cuanto al sector energético.
Musk es un gran defensor de la energía libre de carbono y tampoco hay que olvidar que Tesla es un importante proveedor de sistemas solares y baterías. Sin embargo, Trump ha prometido acabar con la industria eólica marina y rescindir todos los fondos no gastados en virtud de la Ley de Reducción de la Inflación de Joe Biden.
Por último, no hay que olvidar que Musk es dueño de X (la antigua Twitter), red social que ha estado en el punto de mira ante la sospecha de que podría estar amplificando ciertos mensajes en detrimentos de otros. Y en un entorno con menor regulación, Musk tendría más libertad a la hora gestionar su funcionamiento.
"Vosotros sois los medios ahora", escribía Musk este miércoles en X tras resaltar que durante la jornada electoral en Estados Unidos se habían batido récords en cuanto a uso de la red social por parte de sus usuarios.
You are the media now
— Elon Musk (@elonmusk) November 6, 2024
Musk estuvo acompañando a Trump en su mansión de Mar-a-Lago (Florida) en la noche electoral. Una última muestra del apoyo que el hombre más rico del mundo ha prestado al futuro presidente de EEUU en esta campaña, quien a su vez no ha ocultado su agradecimiento.
"Es un supergenio. Tenemos que proteger a nuestros genios. No tenemos tantos", así definió Trump al que, si las cosas no se tuercen, será probablemente una de sus personas de confianza durante los próximos cuatro años.