Instalaciones de Airtificial en Sevilla.

Instalaciones de Airtificial en Sevilla. Cedida.

Empresas

Airtificial se expande en Sevilla: amplía instalaciones con dos nuevas naves y hasta una veintena de contrataciones

Publicada

Airtificial crece en Sevilla. La compañía ha ampliado sus instalaciones sumando dos nuevas naves, y también se dispone a incrementar su plantilla con hasta una veintena de contrataciones para responder a las exigencias de sus últimos contratos en el sector de la Defensa, un apartado del negocio en el que están sostenidas buena parte de sus expectativas de negocio.

Con este incremento, la planta sevillana, que se centra en el desarrollo de los servicios de ingeniería y productos con alta carga tecnológica, pasa a contar con un total de casi 5.000 metros cuadrados.

De ellos, alrededor de 4.000 metros cuadrados corresponden de la nave principal, ya construida; en tanto que se añaden otros 600 metros repartidos en dos nuevas naves, de 300 metros cuadrados cada una, y finalmente otros 300 metros que se distribuyen en plantas de oficinas.

La ampliación de Airtificial está llamada a ser una de las últimas en el polígono de Aerópolis, ya saturado en sus 50.000 metros cuadrados y para el que diferentes voces del mundo empresarial y político vienen pidiendo expansión.

Porque preocupa que la falta de suelo lleve a perder oportunidades con empresas del sector aeroespacial. En Sevilla aún no se ha disipado el mal sabor de boca que dejó, por ejemplo, la decisión de Pilatus de instalarse en Carmona, y que no pocos relacionan con la falta de opciones en epicentros como Aerópolis, que es a día de hoy uno de los tres grandes polos aeroespaciales de Europa, junto con Toulouse (Francia) y Hamburgo (Alemania).

Contratos turcos

La situación no ha frenado, en todo caso, a Airtificial, que venía rumiando desde hace un año la necesidad de crecer en este espacio. Era cuestión de tiempo. Su división de Aerospace & Defense bulle desde la pandemia y es la segunda que más crece del grupo: aumentó sus ingresos un 26% en 2023, hasta 32,6 millones de euros.

Es algo que repercute directamente en la planta de Sevilla, donde sólo el año pasado se sumaron 60 trabajadores nuevos para atender la carga de trabajo.

Ahora se barajan entre 15 y 20 contrataciones adicionales. ¿Qué está pasando? La compañía acelera tras el incremento de la cartera de pedidos logrado con Turkish Aerospace Industries (TAI), un cliente cada vez más asiduo y con el que logró el pasado octubre su último impulso.

Se trata de un contrato en virtud del cual Airtificial proporciona la ingeniería, diseño y fabricación de 31 sticks de vuelo para aviones militares de las Fuerzas Armadas Turcas: el HÜRJET Next Generation Jet Trainer y el último modelo de caza de combate.

Son pedidos valorados en 2,5 millones y suponen el tercer encargo que firma Airtificial con la compañía pública turca desde el inicio de sus relaciones comerciales en 2020. Los anteriores ascendieron a 4,8 millones por 46 sticks en un acuerdo firmado este pasado abril y 4,6 millones por una decena de sticks de vuelo para un avión de combate turco que se acordó en febrero de 2023.

En suma: un nuevo El Dorado para la firma, que acumula más de 15 años de experiencia en el ciclo de producción completo de sticks de vuelo, y muy especialmente para la planta sevillana, que los construye.

Trabajo en ascenso

Pero el optimismo no está solo disparado con estos contratos con TAI. Airtificial, que también fabrica sticks de vuelo para el célebre el A330MRT, el avión militar cisterna de Airbus, cree que el desarrollo de estos instrumentos para los HÜRJET abre la puerta a la compañía a una importante oportunidad en el mercado aeronáutico español.

¿Por qué? La compañía baraja rumores que apuntan a que la Fuerza Aérea española está actualmente en proceso de evaluar varias opciones para sustituir su flota de aviones F-5M, utilizados en el entrenamiento avanzado de sus pilotos, y que entre las opciones que estudian está, justamente, el HÜRJET.

De cumplirse este pronóstico, se verían beneficiados dada su experiencia con este modelo. Mientras tanto, aumenta el volumen de piezas que fabrica para aviones militares, de nuevo con protagonismo de sus plantas andaluzas, que se componen, además de las instalaciones sevillanas, con espacios en Jerez y en El Puerto de Santa María, estas últimas centradas en la fabricación de piezas de fibra de carbono.

De ellas, la planta de El Puerto es el centro de I+D de la compañía, en tanto que en Jerez se diseñan y fabrican más de 100 referencias al año para el A440M, además de piezas para los cargueros C295 de Airbus.