El Gobierno alemán se está planteando desprenderse de la participación del 15,6% que aún controla en Commerzbank, segundo mayor banco del país y que tuvo que ser rescatado durante la crisis financiera, según señala el diario germano 'Börsen Zeitung', que hace referencia al proceso abierto por la Agencia Federal para la Estabilización del Mercado Financiero (FMSA) para encontrar asesores externos para evaluar su posición en la entidad.

"El objetivo es una evaluación abierta y un valoración de la participación (en Commerzbank) y la deducción de recomendaciones estratégicas para la gestión de inversiones", recoge el documento del organismo encargado de administrar la posición del Estado en Commerzbank.

Según la documentación del proceso publicada por la Agencia, estos asesores externos se encargarán también de evaluar la nueva estrategia de la cúpula directiva de Commerzbank, que se espera sea anunciada a finales de 2019.

Alemania rescató en 2009 al Commerzbank mediante la inyección de ayudas públicas por importe de 18.200 millones de euros a cambio de una participación del 25% más una acción en el capital social del banco, convirtiendo al Gobierno germano en el mayor accionista de la entidad, cuyas acciones se han depreciado más de un 90% en la última década, generando abultadas pérdidas para los contribuyentes, que pagaron una media de 26 euros por acción, frente a los poco más de 5 euros actuales.

Commerzbank obtuvo un beneficio neto atribuible de 391 millones de euros en los seis primeros meses de 2019, lo que representa una caída del 26,6% en comparación con las ganancias de la entidad en la primera mitad del año pasado, según informó el banco alemán, advirtiendo de la dificultad de cumplir sus objetivos para el ejercicio tras el resultado contabilizado en el primer semestre y la incertidumbre geopolítica.

La cifra de negocio del segundo mayor prestamista de Alemania disminuyeron entre los meses de enero y junio un 2,5% interanual, hasta 4.285 millones de euros, a pesar de incrementar un 9,5% los ingresos por intereses netos, hasta 2.505 millones, gracias a la suma de 232.000 nuevos clientes particulares y 11.400 empresas en Alemania, mientras que los ingresos por comisiones cayeron un 3,7%, hasta 1.507 millones.

En el segundo trimestre, Commerzbank registró un beneficio neto atribuible de 271 millones de euros, un resultado en línea con el contabilizado en el mismo periodo de 2018, mientras que los ingresos de la entidad alemana cayeron un 2,2% interanual, hasta 2.129 millones. Cerró el primer semestre de 2019 con una posición de capital básico CET1 del 12,9%, dos décimas por encima de la ratio registrada al finalizar el primer trimestre.

A finales del pasado mes de abril, Deutsche Bank y Commerzbank, los dos mayores bancos de Alemania, dieron por terminadas las conversaciones entre ambas entidades con vistas a una eventual fusión al considerar que la operación no iba en interés de los accionistas ni de otras partes interesadas.