Lejos de ver la luz al final del túnel. Al sector bancario le está costando más de lo previsto recuperar su valor en bolsa después de un 2018 fatídico en el que la industria perdió 52.000 millones de euros de capitalización.
La caída de beneficios, el riesgo de mayores provisiones por litigios y, sobre todo, la perspectiva de que los tipos de interés se mantengan en mínimos históricos durante un largo periodo de tiempo están impidiendo que la banca recupere la confianza de los inversores, incluso a valoraciones como las actuales que muchos analistas califican de “ridículas”.
Los seis bancos del Ibex 35 se dejan un 12% de media en bolsa este año. Bankia repite como el valor más castigado con un desplome del 33% que ha provocado que la entidad se aleje cada vez más de los 2 euros por acción de los que se despidió en julio. CaixaBank sigue a la entidad con caídas del 17% en bolsa en 2019. Las pérdidas superan el 11% en Bankinter, el 8% en Banco Santander y el 2% en Sabadell. BBVA es el único valor que mantiene el signo positivo en el año, pero la subida es casi imperceptible, del 0,6%, hasta los 4,66 euros por acción.
El problema es que, en muchas de estas entidades, el desplome viene acompañado de un notable descenso en su base de accionistas. Según las cuentas trimestrales presentadas en la última semana, la banca perdió 128.266 accionistas hasta septiembre, despidiéndose de la barrera de los 6 millones de inversores que recuperó en 2018. En concreto, los seis bancos del Ibex 35 contaban con 5.969.219 accionistas a finales de septiembre, frente a los 6.097.485 que mantenía al cierre de 2018, cuando las entidades sumaron 88.993 nuevos ‘propietarios’ pese a las fuertes caídas bursátiles registradas en el periodo.
BANCO POR BANCO
Por su tamaño y su mayor base accionarial, Banco Santander es la entidad peor parada en este sentido. En concreto, pierde 106.415 accionistas hasta septiembre, dejando la cifra total en 4.025.074 millones de inversores. Así, la entidad cántabra deberá hacer un enorme esfuerzo en la recta final del año para no perder los 4 millones de accionistas que superó en 2017 con el lanzamiento de la Cuenta 1,2,3, que premiaba con un título del banco a cada cliente que contratase este producto.
De la cifra total, 3,8 millones son accionistas con sede en Europa que controlan el 75,5% del capital del banco, frente a los 205.0533 americanos (con el 23,1% del capital social). Excluyendo el consejo de administración (1,11%), los minoristas poseen el 38,96% del capital de la entidad, frente al 59,93% de los institucionales.
En procentaje, la sangría es mayor para Bankia, que ha perdido 6.269 accionistas hasta septiembre, hasta los 178.374. Este recorte del 3,4% respecto al cierre de 2018 es más ‘acusado’ si se tiene en cuenta que la pérdida de inversores de los últimos años ha estado más ligada al proceso por el que la entidad ha ido devolviendo a los minoristas su inversión de la salida a bolsa.
Según datos de Bankia, BFA mantiene un 61,78% del capital de la entidad, frente al 6,27% de los institucionales, que vuelven a caer desde el 6,67% que suponían hace justo un año. El 22,64% del capital está en manos de institucionales extranjeros, mientras que los minoristas aún suponen un 9,3% en la entidad.
A pesar de ser el único banco que aguanta en positivo en bolsa en lo que va de año, BBVA también ha sufrido una notable pérdida de accionistas en 2019. En concreto, la entidad presidida por Carlos Torres ha perdido 18.296 accionistas en el periodo analizado, pasando de 902.708 a los 884.412 actuales.
AGUANTAN EL TIRÓN
La salida de ‘propietarios’ de acciones de estas tres entidades ha deslucido, sin duda, el saldo medio en el sector. De hecho, y pese a las caídas en bolsa, Sabadell, CaixaBank y Bankinter han logrado despedir los nueve primeros meses del año con más accionistas que los que registraban al cierre de 2018.
Por número de accionistas, destaca los 1.321 que ha sumado Sabadell a su capital, hasta dejar la cifra total en 236.844. Sin embargo, el impacto positivo en porcentaje es mayor en Bankinter, al añadir 737 inversores a su ‘base’ hasta los 55.859 accionistas, un 1,3% más que ha cierre de 2018.
La entidad comandada por María Dolores Dancausa logra superar las cifras registradas por un gigante como CaixaBank, que hasta el cierre de septiembre recuperó 656 nuevos accionistas, hasta los 588.656 actuales. Pero cuidado, porque las cifras del tercer trimestre evidencian un claro cambio de tendencia para el banco, con la pérdida de 1.025 accionistas desde el cierre de junio, cuando contaba con 589.681 accionistas.
El 44,3% de su capital social está en manos de CriteriaCaixa, autocartera y representantes del consejo de administración. Y del 55,7% de ‘free float’, un 60,7% pertenece a institucionales extranjeros (frente al 61,6% de cierre de junio), un 33% a minoristas, un 4,9% a institucionales nacionales y un 1,4% sigue en manos de empleados del banco.