HSBC ha revisado sus previsiones sobre la banca española y el resultado no ha sido otro que un fuerte tijeretazo generalizado de precios objetivos para todo el sector. La peor parte se la llevan BBVA y Banco Santander, que dejan de ser compra para el angloasiático.
La nueva recomendación de los analistas de HSBC sobre Santander es mantener acciones en cartera. El precio objetivo que ahora fija la entidad para el banco español es de 2,3 euros por acción frente a una cota anterior de 4,2 euros por título. Esta marca supone un potencial alcista del 18% frente su actual cotización.
Este potencial está prácticamente empatado con el que la entidad angloasiática otorga a Banco Sabadell, para cuyas acciones fijan un precio objetivo de 0,37 euros. La rebaja aquí es la más abultada, pues hasta ahora fijaban un techo de 1,12 euros por título para el banco vallesano.
En el caso de BBVA, que también pasa de comprar a mantener en el baremo de recomendaciones de la firma de inversión, la potencial revalorización del valor se queda en el 16%. Este es el margen con que cuenta desde su actual cotización a los 3,1 euros que fijan los analistas, sensiblemente por debajo de los 5,6 euros por título que hasta ahora marcaban.
De regreso a la banca doméstica, CaixaBank sufre un recorte de precio objetivo desde los 2,6 hasta los 1,88 euros por acción. La entidad heredera de La Caixa se queda así con un potencial del 15% desde los precios que actualmente marca en bolsa.
La revisión de perspectivas de HSBC se completa con Bankia, que logra salvar el euro por acción en el escenario que diseñan los analistas de la entidad. El nuevo precio objetivo de 1,05 euros por acción supone un potencial de revalorización del 20%, si bien hasta ahora la suponían con margen teórico para alcanzar 1,77 euros por título.