Cómo afecta al bolsillo de los ahorradores los tipos negativos en el mercado de deuda

Cómo afecta al bolsillo de los ahorradores los tipos negativos en el mercado de deuda

Banca

La crisis dispara por encima del billón de euros los depósitos en la gran banca

Los bancos aumentan un 8% los depósitos a la clientela en el año de la pandemia, con el reto de ‘aguantar’ el coste que suponen los tipos negativos.

8 febrero, 2021 03:45

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Uno de los efectos más notables de la crisis del coronavirus ha sido el rápido trasvase del gasto y el consumo hacia el ahorro, con la idea de mantener a buen resguardo lo máximo posible para cuando lleguen tiempos económicos mejores. Una situación que el pasado año disparó el volumen de depósitos de la clientela de la gran banca española por encima del billón de euros.

En concreto, los seis bancos que cotizan en el Ibex 35 (Banco Santander, BBVA, CaixaBank, Bankia, Banco Sabadell y Bankinter), despidieron el año de la pandemia con 1,011 billones (con b) de euros en depósitos, según sus últimas cuentas anuales. Es decir, 72.679 millones de euros más que los 939.154 millones registrados a cierre de 2019.

Según indican fuentes del sector, el movimiento se debe también a la liquidez que muchas empresas reservaron para hacer frente a la crisis. Una de las entidades que más ha incrementado su volumen de depósitos ha sido Bankinter, con un crecimiento del 13% en el año hasta los 63.071 millones de euros (7.144 millones más que un año antes). La entidad ya explicaba en sus cuentas anuales que, por primera vez, mostraba un gap comercial negativo, con una ratio de depósitos sobre créditos del 103,2%.

Mayores volúmenes

La tendencia se repite en otras entidades como BBVA o CaixaBank. La primera, engordó los depósitos a la clientela en un 13% hasta los 206.428 millones de euros, mientras que la segunda lo hizo en un 11% hasta los 245.167 millones.

La cifra engordaría a máximos si se tienen en cuenta los datos de Bankia, entidad con la que se fusionará a lo largo de este trimestre. La entidad comandada por José Ignacio Goirigolzarri acumulaba a final de 2020 128.460 millones de euros en depósitos a la clientela, un 3% más que el año anterior.

De momento, y hasta que se concrete la operación, Banco Santander sigue siendo el que acapara el mayor volumen de depósitos, con un total de 251.375 millones de euros, 10.948 millones más (un 5%) que hace un año.

El ritmo de captación ha sido algo inferior en Banco Sabadell, del 2%, hasta los 63.071 millones de euros. Precisamente, la entidad ha sido la última en abrir la puerta al cobro de particulares, en un entorno de tipos negativos que hace muy difícil al sector hacer rentable todo ese dinero ‘guardado’ sin moverse. Una opción que BBVA ya aplica a los clientes sin vinculación que superen los 200.000 euros de saldo. Según explican desde el banco, la medida solo afecta al 0,2% de sus clientes en España.

En busca de la rentabilidad

El debate en el sector por cobrar por los depósitos tiene su lógica. El BCE lleva años penalizando a las entidades por guardar sus depósitos en el organismo, con el objetivo de que ese dinero entre en movimiento hacia la economía real en forma de crédito.

Actualmente, el tipo de facilidad de depósito (lo que el organismo monetario cobra a la banca por guardar su dinero) se sitúa en el -0,50%. Lleva en negativo desde 2014. Es decir, los bancos llevan asumiendo ese coste desde hace más de seis años, resistiendo como pueden la tentación de trasladar al cliente ese coste. Al menos, de una manera directa, pues sí han cambiado sus políticas de comisiones para que las cuentas gratuitas sean solo para los clientes vinculados, es decir, los clientes rentables.

De momento, y como han vuelto a remarcar los principales banqueros del país en la última ronda de resultados del sector, pocos parecen dispuestos a traspasar la línea roja. Salvo BBVA, que ya lo ha hecho, y Banco Sabadell, que no cierra la puerta, el resto de directivos mantienen un ‘no’ rotundo a esta posibilidad. “Jamás se nos ha pasado por la cabeza cobrar a particulares”, “No tenemos ninguna intención de hacerlo”, “Es un despropósito”… son solo algunas de las frases con las que los banqueros han rechazado estos días esta posibilidad.

Eso sí. También lo rechazaba con la máxima contundencia BBVA hace unos meses, así que en este entorno no se puede descartar nada, y menos en un momento en el que el mercado maneja tipos negativos, al menos, hasta 2027. Las previsiones de algunos bancos van incluso más allá.