Tras un 2020 para olvidar, la banca está preparada ya para dar a conocer al mercado sus primeros resultados de 2021, que, según coinciden los analistas, estarán marcados por una ralentización del esfuerzo en la dotación de provisiones y una estabilización de los márgenes.
A la espera de que las medidas de apoyo puestas en marcha por el Gobierno se vayan retirando y empiece a aflorar la morosidad, los bancos siguen dotando provisiones para protegerse frente a la ola de impagos que dejará tras de sí la pandemia, si bien desde UBS y Barclays creen que las entidades españolas han bajado el ritmo en la creación de ese escudo en el primer trimestre.
CaixaBank, que desde el pasado mes de marzo, cuando integró legalmente a Bankia, es la primera entidad del país, ha cerrado el primer trimestre del año con unas provisiones un 12% inferiores al cierre de 2020 y un 42% por debajo de las registradas un año antes, según estiman los analistas de UBS.
En el caso de Sabadell, las provisiones totales que proyectan estos expertos para el primer trimestre estarían sobre los 331 millones de euros, es decir, un 27% y un 63% por debajo de las de los primeros tres meses de 2020 y al cierre del año, respectivamente, de acuerdo con la casa suiza.
Santander, por su parte, baja el ritmo un 1% respecto al cierre de 2020 y un 34% sobre las mismas fechas del pasado ejercicio a nivel global, como estiman desde UBS. No obstante, en el caso de su filial española los analistas de Barclays creen que acelera en el primer trimestre.
Estos mismos expertos apuntan, además, que las provisiones de BBVA caen un 46% en el trimestre respecto al mismo periodo de 2020, si bien respecto al cierre del año suben un 30%, especialmente debido al negocio que el banco mantiene en Turquía (Garanti BBVA).
Estas menores provisiones se enmarcan en el contexto de una fuerte dotación realizada en el primer semestre del pasado ejercicio tras la irrupción de la pandemia, si bien en el tercer trimestre los bancos ralentizaron este esfuerzo pese a la incertidumbre y la insistencia de los supervisores en que sean "prudentes". Con todo, desde Alvarez & Marsal creen que, con las provisiones dotadas hasta ahora, los bancos españoles podrían asumir una morosidad del 7%.
Márgenes estables
Lo que se mantendrá más estable en las cuentas del primer trimestre de los bancos son los márgenes de intereses. Pese a la situación de bajos tipos de interés que los constriñe, los bancos registrarán cifras similares a las del pasado ejercicio.
Los analistas de UBS creen que el margen de intereses de CaixaBank se sitúa en los 1.185 millones de euros (sin contar el negocio de Bankia) al cierre del primer trimestre, lo que implica una ligera caída, del 1%, respecto al año anterior, mientras que en el caso de Santander esta variable se rebaja un 7%, hasta los 7.871 millones, en línea con las estimaciones de Barclays.
En la misma medida disminuye el margen de intereses de Sabadell, hasta los 825 millones de euros, al tiempo que el de Bankinter se sitúa en los 314 millones, un 2% por encima, según UBS.
Para el caso de BBVA, desde Barclays estiman que se sitúe en 3.598 millones de euros al cierre de marzo, es decir, un 11% por debajo del obtenido en el primer trimestre de 2020.