CaixaBank ha decidido reducir el número de afectados por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) a 7.791 empleados, a los que se ha comprometido ante los sindicatos a buscar trabajo en empresas externas. Otros 500 serán reubicados en empresas del grupo CaixaBank.
Así, seguirán afectados por el proceso los 8.291 empleados que el banco puso sobre la mesa al inicio de las negociaciones con los sindicatos, la semana pasada, lo que equivale al 18% de su plantilla, si bien no todos saldrán grupo. Esos 500 serán recolocados dentro del grupo, concretamente en CaixaBank Tech, la filial tecnológica que gestiona la infraestructura de IT de la entidad y desarrolla proyectos relacionados con la transformación digital, según ha informado el banco.
No en vano, en la reunión de este martes la dirección ha reconocido a los representantes de los trabajadores que 8.291 bajas es un número "alto y llamativo", según informan fuentes presentes en la negociación.
La dirección del banco y los sindicatos han celebrado este martes la segunda reunión de la negociación de este ajuste de empleo con las posturas aún muy enfrentadas. En la primera, que tuvo lugar la semana pasada, CaixaBank puso sobre la mesa un recorte de 8.291 empleos, el 18% de la plantilla que tiene una vez integrada Bankia, y el cierre de 1.534 oficinas, el 27% de su red.
En este contexto, el banco ha reiterado este martes el compromiso de recolocar a los trabajadores afectados por el ERE, una iniciativa que ya puso sobre la mesa el pasado martes, en la primera reunión, tras la que manifestó a través de un comunicado. En todo caso, ha señalado que el plan de recolocación se explicará más extensamente en próximas reuniones.
"Se ha trasladado el compromiso de la entidad con un plan de recolocación y acompañamiento de todas las personas afectadas para facilitar su incorporación y adaptación a un nuevo puesto de trabajo, que será absolutamente diferencial y del que se dará más detalle en próximas reuniones", comunicó el banco la semana pasada.
Se trata de una medida común en otros fuertes procesos de ajuste de empleo que han llevado a cabo los bancos en los últimos años. Santander, que ha realizado varios en los últimos años, ha tenido la costumbre de recurrir a una empresa externa para recolocar a los trabajadores que se acogieran al ERE, algo que ha hecho incluso para la totalidad de los afectados en los últimos procesos.
Los sindicatos acusan de "manipular"
El banco reitera su compromiso en plena negociación por el ajuste, que ha saltado de la mesa de negociación al Gobierno debido a la participación del 16% que mantiene el Estado en CaixaBank como herencia de su 61% en Bankia. Durante la última semana, varios ministros, especialmente la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, han cargado duramente contra los ajustes de empleo de la banca y contra los "altos sueldos" de sus ejecutivos, algo que han elevado incluso al Banco de España para intentar poner coto a estas remuneraciones.
Los sindicatos, por su parte, en la reunión mantenida este martes están acusando al banco de "manipular" y tergiversar" los datos económicos en su favor para justificar el ERE.
"Desde UGT manifestamos a la dirección de Caixabank que el informe que nos ha presentado tergiversa los datos a su interés para justificar este ERE. Exigimos que recapaciten y que se retiren las propuestas que se han efectuado, que atentan contra los intereses de los trabajadores y trabajadoras", han apuntado desde el sindicato que lidera Pepe Álvarez.
La formación insiste, además, en que es necesaria la "voluntariedad" de las medidas, así como la homologación de las condiciones laborales a todos los empleados que tiene ahora CaixaBank, vengan de donde vengan.
Por su parte, CCOO ha trasladado a la dirección de CaixaBank que el informe que la entidad ofreció a los sindicatos para justificar el ERE "manipula los datos". "No vamos a aceptar medidas traumáticas ni rebajas salariales para que se las repartan unos pocos", han añadido.
Desde la reunión de la pasada semana, fuentes sindicales han ido explicando a este periódico que el informe utiliza para justificar el ERE datos del ejercicio 2020, un año atípico por el impacto de la crisis sanitaria de la Covid-19.
La dirección del banco, por su parte, ha respondido a los representantes de los trabajadores que "no comparten que su informe sea sesgado" y ha incidido en que existen causas organizativas y productivas que justifican el ERE. De hecho, ha trasladado a los sindicatos que en algún caso han sido incluso "prudentes".