Santander registró un beneficio de 3.675 millones de euros en los seis primeros meses del año, frente a las pérdidas de 10.798 millones que tuvo que anotarse en las mismas fechas del año pasado debido a la dotación de provisiones por la pandemia y la actualización del fondo de comercio y los activos fiscales diferidos.
La entidad contabilizó 530 millones de euros por costes de reestructuración anunciados en el primer trimestre y, descontado este efecto, el banco habría ganado 4.205 millones de euros, lo que supone el mayor beneficio ordinario de Santander en un primer semestre desde 2010.
La entidad ha reiterado su voluntad de pagar dividendo ahora que el Banco Central Europeo (BCE) ha dado libertad a los bancos para recuperarlo. Santander tiene como objetivo restablecer un payout del 40-50% del beneficio ordinario.
Empieza la recuperación
El banco empezó a notar la recuperación en este primer semestre. El margen de intereses aumentó un 8% en el primer semestre tras registrar el mejor trimestre desde que empezó la pandemia, debido fundamentalmente a los volúmenes de crédito y depósitos y el menor coste de estos últimos. Fue especialmente fuerte en el Reino Unido (+29%), España (+10%) y Brasil (+10%).
Los ingresos por comisiones alcanzaron niveles anteriores a la pandemia (+8%), con crecimientos en productos y servicios de mayor valor añadido, sobre todo en Santander CIB y Wealth Management & Insurance.
También refleja la recuperación el incremento interanual de la facturación de tarjetas (+26%) y terminales puntos de venta o TPV (+54%), así como los fondos de inversión (+18%). Como resultado, los ingresos totales aumentaron un 8%, hasta 22.695 millones.
Los costes, sin embargo, aumentaron un 3%, algo que el banco achaca al incremento general de la inflación en 2021 y las inversiones en tecnología. Con todo, la ratio de eficiencia del grupo mejoró 159 puntos básicos, hasta el 45,7%.
Al cierre de junio, un 92% de las moratorias concedidas por Santander había expirado y solo un 5% estaba clasificado como dudoso. La cartera en moratoria pendiente ascendía a 8.700 millones de euros (centrada fundamentalmente en España y Portugal), de los que unos 7.500 millones de euros expiran a final del tercer trimestre.
De acuerdo con el banco, sus recursos de clientes alcanzaron una nueva cifra récord (1,04 billones de euros, +7%), tras superar el billón de euros por primera vez el trimestre pasado. Los depósitos a la vista repuntaron un 9%, hasta 685.000 millones de euros, y los fondos de inversión un 18%, hasta 183.000 millones de euros.
La ratio de mora, por su parte, descendió cuatro puntos básicos en el último año, hasta el 3,22%, mientras que la ratio de cobertura alcanzó el 73%. El coste del crédito, es decir, lo que el banco provisiona en función de la pérdida esperada de la cartera, mejoró en 38 puntos básicos en los últimos doce meses, hasta el 0,94%, una cifra mejor de lo esperada gracias a las menores dotaciones, que se situaron en el primer semestre en 3.753 millones de euros (-42%). El fondo total de provisiones acumuladas ascendió a 24.239 millones.
En cuanto a la solvencia, la ratio de capital CET1 aumentó 27 puntos básicos, hasta el 12,11%. En el trimestre, el banco generó 7 puntos básicos orgánicamente tras el aumentar el crédito y reservar 18 puntos básicos de capital, el equivalente al 50% del
beneficio ordinario de este trimestre para una posible remuneración a los accionistas. El banco ha explicado que el colchón de capital CET1 de Santander frente al capital mínimo exigido es ahora de 325 puntos básicos, en comparación con el colchón anterior a la pandemia, que era de 189 puntos básicos.
Regiones
Por regiones, el beneficio ordinario del primer semestre estuvo cerca de triplicarse en Europa, hasta 1.426 millones de euros (+172%), y en Norteamérica, hasta 1.628 millones de euros (+178%), mientras que creció un 41% en Sudamérica, hasta 1.645 millones de euros.
Más concretamente, en España el beneficio ordinario en el semestre fue de 390 millones de euros, un 56% más respecto al mismo periodo del año anterior, debido principalmente a un crecimiento de los ingresos y menores costes (-7%). Los ingresos por comisiones aumentaron un 2%, hasta alcanzar los niveles prepandemia, y el segundo trimestre mostró una mejora del dinamismo comercial, sobre todo en hipotecas, que superó el nivel más alto alcanzado en los tres últimos años.
Por su parte, Digital Consumer Bank, formado por la combinación de los negocios de Santander Consumer Finance (SCF) y Openbank, logró un beneficio ordinario de 569 millones de euros, un 11% más, gracias a unos mayores ingresos (+4%) y un menor coste del crédito (0,64%).
En Estados Unidos, el grupo alcanzó un beneficio récord de 1.291 millones de euros en el semestre. El beneficio también creció en todas las regiones y negocios globales, sobre todo en Brasil, Reino Unido, España y Chile. Por su parte, Santander Corporate & Investment Banking (Santander CIB) obtuvo un beneficio ordinario de 1.197 millones de euros, un 45% más, mientras que Wealth Management & Insurance aportó al beneficio del grupo 1.084 millones de euros, un 9% más, tras aumentar a doble dígito los activos gestionados y las primas emitidas.
Cambios en Brasil
En otro orden de cosas, Santander ha anunciado que Sérgio Rial, actual consejero delegado de Santander Brasil y responsable regional de Sudamérica, será el nuevo presidente del consejo de administración de la filial de Brasil y dejará sus funciones
ejecutivas a partir del 1 de enero de 2022.
Mario Roberto Opice Leão le reemplazará como consejero delegado y Carlos Rey de Vicente como responsable regional de Sudamérica. Rial seguirá como consejero no ejecutivo de la matriz del grupo.