Cani Fernández, candidata a presidir la CNMC, durante su intervención de este jueves ante la Comisión de Asuntos Económicos del Congreso.

Cani Fernández, candidata a presidir la CNMC, durante su intervención de este jueves ante la Comisión de Asuntos Económicos del Congreso.

Banca

La CNMC se fija noviembre como límite para decidir si la opa de BBVA sobre Sabadell se aprueba en fase 1

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La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) se ha fijado el mes de noviembre como límite para decidir si la opa y fusión de BBVA sobre Sabadell se aprueba en fase 1. 

"La Sala de Competencia, reunida hoy", refiriéndose a este miércoles, "no va a adoptar formalmente ninguna decisión. Pero el plazo máximo de la primera fase está a punto de terminar, con lo que la decisión se adoptará necesariamente en las próximas semanas, a mediados de noviembre", señalan fuentes del organismo presidido por Cani Fernández a EL ESPAÑOL-Invertia.

Durante las últimas horas se había especulado con la posibilidad de que la autoridad de Competencia tomara este miércoles alguna decisión relativa a la operación, si bien finalmente no va a ser así.

Por el momento, el organismo que dirige Cani Fernández se encuentra realizando el análisis de la operación de integración de ambos bancos en primera fase para valorar si la hipotética fusión entre ambos generaría problemas de competencia.

Este análisis podría pasar a fase 2, en la cual los expertos de la autoridad realizarían un análisis más en profundidad. Por el momento, se desconoce si esto será necesario. Desde BBVA asumen que no, mientras que desde Sabadell dan por sentado que así será.

De fase 1 a 'fase 3'

De momento, lo único que se ha dado a conocer por parte de la autoridad de Competencia es que el proceso de análisis en fase 1 se está alargando porque se trata de una operación hostil, en la que es necesario ir solicitando al banco opado información poco a poco.

La CNMC cuenta para ello con unos plazos reglados, si bien cada vez que solicita nueva información a Sabadell, esos plazos empiezan a contar. Es por eso por lo que Fernández ya dijo que la operación se estaba retrasando.

"Como pueden imaginar, en el caso de una opa hostil, tenemos toda la información del notificante, es decir, del adquiriente, pero no tenemos la información del objeto de la opa, del Sabadell", explicó Fernández durante una intervención inicial en la Comisión de Economía del Congreso el pasado mes de septiembre.

En caso de que pasara a fase 2, necesariamente debería derivarse a una suerte de fase 3, en la que el Gobierno tiene derecho a opinar sobre las condiciones que la CNMC quiera imponer a BBVA para garantizar la competencia efectiva en el sector. También podría sugerir nuevos compromisos. El análisis comenzó el pasado mes de mayo, cuando el banco notificó su opa hostil por Sabadell.

Esta decisión de la CNMC es determinante para conocer si la fusión entre BBVA y Sabadell puede seguir adelante. Si la autoridad rechaza la operación, el banco azul se quedaría sin opciones para integrar el alicantino aunque lograra el sí de los accionistas de Sabadell a la opa.

En cambio, si la CNMC aprueba la operación, aunque sea con condiciones y/o compromisos, el banco sumaría una nueva autorización al visto bueno dado ya por el BCE.

En paralelo, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) debe dar su aprobación al folleto de la opa. Algo que se espera que ocurra después de conocer la opinión de la CNMC para que los inversores de Sabadell cuenten con la máxima información sobre la operación.