El Principado de Asturias valora participar en el rescate de Duro Felguera y entrar como accionista destacado de la compañía junto con la SEPI. Así lo confirman varias fuentes vinculadas con el proceso a Invertia que agregan que la decisión definitiva del gobierno asturiano -así como el montante con el que participaría- se decidirá en los próximos días.
Este es uno de los últimos flecos que va quedando por cerrar en el rescate de la compañía. Como ya informó este periódico, la SEPI ya ha tomado la decisión de entrar en Duro Felguera con un montante por definir, pero que estará en la línea de los 120 millones solicitados en agosto por el equipo del CEO José María Orihuela.
Desde hace semanas la SEPI intenta atar todos los cabos sueltos del rescate y uno de ellos es la entrada de un segundo inversor que garantice la viabilidad de la compañía a largo plazo. En el caso del Principado de Asturias la decisión se tomaría porque el equipo de Adrián Barbón considera a Duro Felguera una empresa estratégica dentro del tejido productivo asturiano.
Un informe presentado en septiembre del año pasado por la Universidad de Oviedo indicó que en 2019 la aportación de Duro Felguera a Asturias fue de 255 millones de euros, lo que supuso el 1,18% de PIB de la región.
En términos de empleo, este se situó en los 3.858 puestos de trabajo directos e inducidos, lo que representó el 1,02% de la región y el 4,03% para Gijón. Ese año el 60,39% de la plantilla, 674 empleados, se localizaba en Asturias.
Salida de Orihuela
Las fuentes vinculadas al proceso y consultadas por Invertia indican que la SEPI daría luz verde a la operación la próxima semana y que la idea es que se apruebe en el Consejo de Ministros del 9 de febrero. Por eso necesitan conocer la respuesta definitiva del Principado de Asturias en los próximos días para cerrar definitivamente la operación.
Otro de los flecos que está pendiente es conocer la postura de los bancos en torno a la refinanciación de la deuda de 85 millones que tiene el grupo. La compañía se compromete a pagar el 10% ahora y la otra cantidad se abonaría con una futura ampliación de capital con la SEPI como principal accionista.
Además, reclama a las entidades financieras 100 millones de euros en avales. Una operación que está en estudio en este momento por el sindicato bancario y sobre el que todavía no hay respuesta y no hay fecha concreta para que llegue. Las entidades recuerdan que es un proceso complejo y que su análisis requiere tiempo.
La entrada del Principado en el capital de Duro Felguera sería una solución in extremis tras fracasar la entrada de hasta cinco inversores (Blas Herrero, Capital Energy, Ultramar Energy e incluso un grupo chino, entre otros) por las condiciones impuestas por el equipo de Orihuela.
Las fuentes consultadas por este diario indican además que ninguna de estas ofertas -canalizadas a través de Alantra- ofrecían alternativas reales de capitalización y que solo aportaban una cartera de proyectos a medio y largo plazo. Sin entrada de dinero fresco todas estas ofertas se enfriaron y actualmente están en punto muerto.
Este diario publicó además que la primera decisión de la SEPI al desembarcar en Duro Felguera será el nombramiento de un nuevo equipo directivo que sustituya al CEO. José María Orihuela es rechazado por la banca y no cuenta con el apoyo de la sociedad pública. El nuevo equipo ya está fichado y se dará a conocer cuando se presente el proyecto y se haga el desembarco oficial.
El problema es que la salida de Orihuela todavía no se ha cerrado. Las fuentes consultadas indican que el CEO pide una indemnización de tres millones de euros que la SEPI no está dispuesta a pagar. Las negociaciones se suceden para cerrar estos flecos antes del anuncio oficial del rescate previsto para la próxima semana.
Pérdidas históricas
El rescate de Duro Felguera por parte de la SEPI se hará en el marco del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas aprobado en julio por el Gobierno para ayudar a las empresas más afectadas por la Covid. Cuenta con 10.000 millones y por el momento ya ha salido al rescate de Air Europa con 475 millones de euros.
Los 120 millones que ha pedido Duro Felguera se dividen en la suscripción por el Fondo de una ampliación de capital por importe de treinta millones de euros, un préstamo participativo por importe de setenta millones de euros y un préstamo ordinario por importe de veinte millones de euros.
Este dinero es vital para garantizar la viabilidad de la compañía, pero se antoja escaso ante los crecientes problemas económicos de la compañía. La entrada del Principado sería clave para ganar en liquidez y dar tranquilidad a sus cuentas en el mediano plazo.
Las fuentes consultadas indican que la situación es muy complicada y que Duro Felguera ya está teniendo problemas de liquidez a raíz del empeoramiento de la situación económica generada por la pandemia de coronavirus, lo que le impide buscar nuevos proyectos y cerrar más contratos.
Sus últimos resultados presentadas correspondientes al primer semestre del año incluyeron unas pérdidas históricas de 114 millones de euros, frente a los beneficios de 4,9 millones de igual periodo del año anterior; y una caída del 59,8% de sus ventas que llegaron a los 71,7 millones.