Hay obras que por su complejidad, belleza, utilidad y los ingresos que generan acaban siendo consideradas como ‘joyas de la corona’ de las empresas que las llevan a cabo. A lo largo de los últimos años, y dada la experiencia internacional de Acciona, ACS, Sacyr, Ferrovial y FCC, su número ha ido creciendo. Pero, como dice el refrán, ‘a rey muerto, rey puesto’. Y las concesiones que en su momento fueron santo y seña están dando lugar a otras que no desmerecen a sus antecesores.
En el caso de Acciona, varias son las obras que se pueden catalogar como emblemáticas. Una de las más recientes, adjudicada en junio de este año, tendrá una inversión de 2.340 millones de euros. Se trata de la financiación, construcción, operación y mantenimiento de un canal de prevención de inundaciones de más de 48 kilómetros de longitud entre las ciudades estadounidenses de Fargo (Dakota del Norte) y Moorhead (Minnesota). Su plazo de ejecución es de cinco años y la concesión durará otros 29.
En el ámbito del transporte, la compañía presidida por José Manuel Entrecanales tiene varias ‘joyas’ como las obras de los metros de Sao Paulo, Quito y Dubái. En el caso de la ciudad brasileña, el proyecto está valorado en 2.300 millones de euros. Tras concluir la obra, el contrato de operación y mantenimiento se extenderá por 19 años. La línea 6 (o línea naranja) es el proyecto de infraestructuras público-privado más grande en desarrollo en América Latina.
En Europa, Acciona está presente en la construcción en Noruega de unos túneles gemelos de 20 kilómetros que unen las ciudades de Oslo y Ski. Para su desarrollo, se utilizaron cuatro tuneladoras de manera simultánea. Otros túneles también fueron protagonistas en Australia: los Legacy Way. Y, en Canadá, Acciona es licitador preferente en la extensión de la línea Millennium Line Broadway del metro de Vancouver. Estará concluida en 2025.
Ya en suelo patrio, Acciona ha ‘revivido’ un icono de la arquitectura: la estación de Canfranc. Ha construido el nuevo edificio y rehabilitado el antiguo, que data de 1928. Será un hotel de cinco estrellas con más de un centenar de habitaciones.
Las autopistas, protagonistas
En el caso de Sacyr, sus ‘joyas de la corona’ tienen nombre propio: autopistas. Y un país: Italia. La más importante de todas, la autopista Pedemontana-Veneta. Con 162 kilómetros de longitud, y una inversión en construcción cercana a los 2.600 millones de euros, en 2022 estará completamente operativa. La cartera de ingresos prevista supera los 12.000 millones de euros. Y la financiación para su construcción se realizó a través de la mayor emisión de bonos en Europa de un proyecto greenfield por valor de 1.571 millones de euros.
Las otras dos ‘joyas’ italianas de la firma presidida por Manuel Manrique son la A3 (Nápoles-Pompeya-Salerno), por un lado. Y, por otro, la explotación de la A21 (Turín-Alessandria-Piacenza) y la A5 (Turín-Ivrea-Quincinetto). También incluye la autopista de enlace A4/A5 (Ivrea-Santhià) y el Sistema de Autopistas de Circunvalación de Turín (Satt) y el tramo Turín-Pinerolo.
Al otro lado del Atlántico, Sacyr forma parte de un consorcio que desarrolla la autopista Américo Vespucio Oriente I, en Santiago de Chile. La inversión es de 1.000 millones y entrará en operación en 2022. Más tarde, en 2025, en Lima (Perú).
En España, Sacyr ganó este año la construcción del nuevo edificio del Hospital 12 de Octubre, en Madrid. Un contrato valorado en 227 millones de euros y con un plazo de ejecución de 38 meses. Contará con 740 habitaciones médico-quirúrgicas, 40 quirófanos y 756 paneles fotovoltaicos.
De Australia a Estados Unidos
Australia es el país donde ACS, el grupo presidido por Florentino Pérez, va a tener una de sus ‘joyas de la corona’: la North East Link, en Melbourne. Construirá y explotará, hasta 2051, esta infraestructura de dos túneles de tres carriles (6,5 kilómetros de longitud) que conectará la carretera de circunvalación metropolitana M80 con la autopista Eastern Freeway (M3).
El desarrollo de la primera fase de la autopista M6, en Sídney, y la construcción de una red de transmisión de alta tensión, en Queensland, serán también obras emblemáticas de ACS en el país de los canguros.
Por lo que respecta a FCC, las obras de ampliación, operación y mantenimiento de la autopista A465, en Gales, será su ‘joya’ más preciada. Con un presupuesto cercano a los 500 millones de euros, es uno de los mayores contratos de este año para la firma en la que Carlos Slim es el mayor accionista.
Sin olvidar su presencia en el conocido como Tren Maya (México), donde realiza el segundo tramo (705 millones); su desembarco en Países Bajos, con el diseño, construcción y mantenimiento de un tramo de la autopista A9 (inversión de 845 millones de euros); o la reforma del Santiago Bernabéu, cuya fecha de finalización será 2023.
Por último, Ferrovial. Si hasta ahora la autopista 407 ETR, en Canadá, y el aeropuerto londinense de Heathrow eran las dos infraestructuras más carismáticas, se ha producido el relevo. El grupo presidido por Rafael del Pino ha encontrado otro filón en Estados Unidos.
Se trata de las autopistas texanas o managed lanes. En concreto, los tráficos de la NTE, la NTE 35W y la LBJ se elevaron un 32,5%, un 29,6% y un 19,2%, respectivamente, en los nueve primeros meses del año. Eso se tradujo en unos ingresos para Ferrovial de 49 millones de euros. Las dos primeras ya han superado los niveles de tráfico de 2019. Heathrow sigue sin repartir dividendos, y la 407 los recuperó en el tercer trimestre.