El mexicano Carlos Slim, a través de FCC (Fomento de Construcciones y Contratas), ha vuelto a poner otra pica en España. Así, ha lanzado una OPA sobre el 24% de la promotora inmobiliaria Metrovacesa. ¿Importe? 283,93 millones de euros. Además, el grupo FCC cuenta con el 5,4% de la promotora de Banco Santander y BBVA. De esta manera, Carlos Slim controlará el 29,4% de la promotora.

Un movimiento que hace que una de las mayores fortunas del mundo (55.930 millones de dólares en 2021, según Forbes), añada una muesca más a su presencia en España. Una presencia que se remonta a 2014. En diciembre de ese año, pagó 650 millones de euros por el 25,6% de FCC.

“La OPA es un paso más de Carlos Slim para posicionarse fuertemente en el ladrillo español”, afirma Sergio Ávila, analista de IG. Conviene recordar que Slim está firmemente posicionado en esa industria en Latinoamérica a través de Grupo Carso e Inmobiliaria Carso.

Tampoco conviene olvidar que, desde hace tiempo, diversifica sus negocios desde telecomunicaciones hacia el sector de la construcción. “Sus pasos van focalizados a seguir creciendo por esta industria por lo que, siguiendo su estrategia, tiene todo el sentido plantear la idea de que querrá seguir aumentando su presencia en el sector en España y a nivel internacional”, añade Sergio Ávila. En España, el mercado promotor todavía está muy fragmentado. 

“La oferta parcial supone una prima sobre el precio de cierre del 22 de marzo del 20,2%”, indica Javier Díaz, analista de Renta 4 Banco. Y añade: “FCC estaría ‘financiando’ la prima ofrecida con aproximadamente el dividendo de los dos próximos ejercicios de Metrovacesa”.

Hay que tener en cuenta que la contraprestación es en efectivo. Y Metrovacesa cuenta con escasa liquidez. De ahí que en Renta 4 Banco apunten a que podría ser el primer paso de una operación mayor.

“Teniendo en cuenta el accionariado de Metrovacesa (Santander y BBVA ostentando un 70% seguidos de Carlos Slim, con un 5,5%) y el de FCC (74,2% en manos de Slim), consideramos que esta oferta parcial podría ser el primer paso de una mayor operación corporativa”, pronostican. Y esa mayor operación sería, según sus previsiones, entre Metrovacesa, Realia (controlada también por Carlos Slim, con un 73,3%) y FCC Inmobiliaria.

Participaciones destacadas

El desembarco de Carlos Slim se produjo en España en 2014. Por aquel entonces, FCC vivía una situación comprometida. Sus números naufragaban y se ahogaban arrastrados por una débil economía española y un insostenible nivel de deuda: 5.016 millones. Un año antes, había sido un 15,9% superior.

“FCC está en proceso de superar el año más difícil de la crisis más dura vivida en los más de cien años de historia del Grupo”, decía Esther Alcocer Koplowitz, su presidenta, en la memoria de ese año. A la par, anunciaba la “nueva etapa” tras el desembarco del ‘ingeniero’, como se le conoce popularmente a Carlos Slim.

Han pasado los años, y Slim ha seguido apostando por FCC. En la actualidad, tiene el 74,1% en la constructora y concesionaria. Durante el último año, dobló su beneficio neto respecto al año anterior (llegó a 580,1 millones de euros) y aumento su resultado de explotación un 7,6%. La deuda aumentó en 427,9 millones, para situarse en 3.225,7 millones. Eso fue debido a la consolidación global de la deuda de Realia y Jezzine en el área inmobiliaria.

Junto a FCC, Carlos Slim ha demostrado un ‘cariño especial’ por el inmobiliario español. Así, posee el 73,3% de las acciones de la inmobiliaria Realia y, hasta ahora, el 5,4% de Metrovacesa (llegará al 29,4%, como ya ha quedado reseñado). La inmobiliaria Quabit también estuvo en su radar, pero la absorción de esta por parte de Neinor frenó sus anhelos.

Pero más allá del ladrillo, el mexicano tiene otras participaciones destacadas. Por ejemplo, el 4,3% en el grupo de medios Prisa (El País y la cadena Ser). También tiene el 100% de Soinmob Inmobiliaria.

Esta sociedad controla, a su vez, el 64% del equipo de fútbol Real Oviedo; y el 100% de Jezzine Uno. Esta última tiene su principal baza en las rentas que generan las más de 400 oficinas e inmuebles que en su día, allá por 2012, compró a CaixaBank por 428 millones de euros. El paso anterior a la OPA de Metrovacesa fue la creación de Finver Inversiones 2000, con 262 millones. Su fin es llevar a cabo actividades de holding, y hacer de paraguas a sus participadas en España y a sus futuras inversiones.