Todos los ciudadanos sueñan con ese día en el que todo volverá a la normalidad; si es que ese concepto sigue existiendo. La desescalada será distinta en cada sector. El comercio textil pone sus esperanzas de reapertura de tiendas en el mes de junio. Pero, ¿cómo se producirá y qué nos encontraremos en las tiendas?
China, de momento, es el único espejo donde mirarse. En el país la apertura de tiendas ha vuelto, pero con aforos limitados, controles de temperatura y la prohibición de realizar devoluciones de prendas de vestir. Asimismo, tratan de seguir potenciando la venta online.
En España, “la preocupación está en qué va a pasar en las tiendas”, explica a Invertia Rosa Pilar López, experta en el sector moda de la consultora Kantar, quien señala que existen ciertas incógnitas sobre “cómo se se gestionarán los aforos, las medidas de higiene con la ropa o las pautas de seguridad a seguir”; así como el factor miedo psicológico del consumidor en aspecto como la desinfección de la ropa que uno se pruebe o devuelva por otra talla, por ejemplo.
Estas también son las principales inquietudes con las que trabaja ya el sector de cara a una apertura incierta que dependerá de la evolución de la crisis sanitaria y de las propias medidas que tome el Gobierno.
Desde la Asociación Empresarial del Comercio Textil, Complementos y Piel (Acotex), esperan que esta apertura sea en junio. Saben que será “escalonada” y desde luego bajo una serie de medidas de seguridad que el sector está esperando a concretar con el Gobierno.
¿Qué medidas?
Algo en lo que coincide todo el sector. “Estamos trabajando en el día después con distintas propuestas y medidas complementarias”, aseguran a Invertia fuentes de El Corte Inglés, donde ya tienen un equipo formado por profesionales de los departamentos de la compañía que barajan distintos escenarios de actuación.
Además, la compañía presidida por Marta Álvarez juega con una baza a favor a la hora de abrir su parte comercial cerrada por el estado de alarma. Y es que el aprendizaje ya lo tienen a través de sus 300 centros de alimentación (entre supermercados e hipermercados) que están abiertos al público e implementando medidas de seguridad. Estas medidas creen que se mantendrán en las tiendas de ropa cuando abran sus puertas.
"Tomamos la temperatura a los empleados, contamos con dispositivos de guantes y mascarillas; así como un protocolo gel hidroalcohólico y de separación de dos metros para trabajadores y clientes en las tiendas", afirman. Hasta los carros de la compra y los bolis para firmar los pagos se desinfectan en el momento.
No es la única en el sector. Desde Tendam trabajan para que "una vez las autoridades den autorización, la vuelta a la normalidad en nuestras tiendas sea lo más rápida posible", señalan. La cadena propietaria de marcas como Springfield y Cortefiel contempla diferentes alternativas y modelos.
"Desde el principio se han constituido grupos de trabajo específicos dedicados a plantear cuáles serán las condiciones y medidas necesarias para la vuelta a la normalidad con la mayor seguridad y satisfacción para nuestros clientes y empleados, en cualquiera que sea el escenario", indican.
Por su parte, en Mango avanzan que “están trabajando en el plan a seguir los próximos meses y las medidas a poner en marcha”, aunque no pueden concretar más.
Y como curiosidad o novedad, hay dos empresas gallegas (Modular Container y Siimat Ingeniería) que están desarrollando un prototipo de cabinas de desinfección en espacios públicos, con una función parecida a la de un túnel de lavado. Es una iniciativa que en algunos países latinoamericanos ya se usa.
¿Y el online?
La compra online en todas sus tipologías ha sido una de las más beneficiadas por la crisis sanitaria. Y así parece que seguirá siendo. Dentro de más de seis meses la compra online ya se habrá consolidado durante el aislamiento y ganará peso en 2021, según las previsiones de la consultora Deloitte.
“El online podría repuntar por el miedo a contagios en un principio o simplemente porque los usuarios que lo usaron durante la cuarentena les gusto la experiencia y quieren repetir”, explica la experta de Kantar.
En caso de El Corte Inglés la experiencia ha sido buena. Su click&collect ha llegado a multiplicar por cinco sus ventas. Aunque desde los grandes almacenes no se atreven a hacer una predicción de lo que ocurrirá con este canal de venta, si creen que “tendrá mayor peso”.