El anuncio de la aprobación de las restricciones al ocio nocturno por parte de la Comunidad de Madrid, supone de hecho, la clausura de las discotecas, salas de fiesta y tablaos flamencos de toda la comunidad, lo que ha supuesto “un auténtico mazazo” para el sector que se preparaba para poner en marcha el próximo fin de semana un plan para la implantación del Registro Sanitario Digital para garantizar la trazabilidad de la enfermedad en los locales de ocio, según un comunicado de la asociación de empresarios de ocio nocturno Noche Madrid.
Noche Madrid reitera su voluntad de mantener todos los cauces de diálogo abiertos con la Comunidad de Madrid que permiten evaluar paso a paso a la situación existente que permita poner en marcha un Plan de Rescate para sector recreativo, ya que se enfrentan al colapso generalizado de sus empresas que necesitan recursos económicos inmediatos para hacer frente al pago de sus alquileres que asciende a 12,5 millones de euros al mes, y que ya supone una deuda de 60 millones de euros para las pymes del sector.
Asimismo, resulta urgente y absolutamente necesario ampliar el plazo de carencia para el reintegro de todos los créditos suscritos por el sector para garantizar su supervivencia, así como un plan de protección del empleo juvenil y femenino para salvar uno de los principales nichos de empleo de estos colectivos.
Más botellones
El sector recreativo quiere dejar claro, una vez más, que asume la decisión de la Comunidad de Madrid de acuerdo con su compromiso social y trayectoria, pero que no la comparte, y desea mostrar su preocupación entendiendo que la adopción de este tipo de medidas, no contribuyen a la solución de la crisis sanitaria.
“Estamos viendo en Cataluña que las restricciones drásticas al ocio nocturno provocan y promueven la extensión de los botellones y la proliferación de todo tipo de fiestas ilegales en fincas y recintos abandonados sin ningún tipo de control ni medidas de prevención que son un auténtico foco de contagio”, señalan.
En este sentido, creen que el próximo fin de semana más de 25.000 jóvenes van a convocar y organizar sus propios eventos y botellones, que “son una auténtica amenaza para la salud sin contar con el último dique de contención que significaban los locales de ocio”.
Tras el cierre, consideran que “se va a perder la oportunidad de realizar un gran ensayo del Registro Sanitario Digital que debería ser de utilidad y servir de modelo de implantación mucho más allá de los locales de ocio, contando con su implementación en todo tipo de eventos, así como en la actividad de las grandes superficies”.