En plena semana crítica por las negociaciones del brexit, el sector pesquero también reclama una parte de los fondos europeos que recibirá España. La patronal, Cepesca, ha cifrado en 381 millones de euros la inversión necesaria para reformar estructuralmente su modelo y desarrollar una actividad más competitiva, resiliente y sostenible.
Así se lo han trasladado a Luis Planas, ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, con quien se reunieron hace semanas y les anunció la idea de incorporar medidas de modernización de buques, desarrollo tecnológico e innovación, digitalización del sector, entre otras.
Fue una reunión con todo el sector agroalimentario en la que Planas anunció la intención de destinar 1.050 millones, de los cuales cerca de 100 millones serían para el sector pesquero, ha recordado Javier Garat, secretario general de Cepesca.
Pero el sector reclama más ayudas. Del total de los 381 millones del Plan de Recuperación del sector pesquero, 142,8 millones corresponden a la primera de las áreas de transformación, 179,3 a la de sostenibilidad de la actividad y 58,8 a la de cohesión social y continuidad.
Con estos fondos también se pretende solucionar algunos de los problemas que la industria arrastra desde hace años, como la pesca ilegal o el relevo generacional. “En España hay 32.000 tripulantes. Sin lugar a dudas necesitamos que se vayan cubriendo las necesidades de relevo. La gente se va haciendo mayor y se va jubilando”, ha señalado Garat.
También recuerda que “la flota cada vez es más antigua”, especialmente en bajura con barcos en Galicia que superan los 40 años de antigüedad. Asimismo, ha denunciado que “el consumo del pescado en España se ha ido reduciendo progresivamente. En 10 años ha caído el 20% en consumo en hogares”. Y eso que a pesar de la Covid ha crecido en los hogares, pero “se ha perdido mucho en el canal horeca”.
De esta forma, el sector quiere aprovechar así la oportunidad que supone el “Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia” diseñado por el Gobierno español para canalizar los fondos europeos correspondientes a nuestro país –140.000 millones de euros en los próximos tres años– y afrontar así el suyo propio de recuperación.
Líneas estratégicas
Dentro del plan diseñado con la consultora Deloitte, la primera línea estratégica aborda el desarrollo tecnológico de las empresas pesqueras, incorporando tecnologías punteras, tales como blockchain o inteligencia artificial.
“El objetivo es mejorar la trazabilidad de los productos de la pesca, la accesibilidad, análisis y utilización de datos y conectividad a bordo de los buques, la optimización y digitalización de los sistemas productivos y organizativos a lo largo de la cadena de valor, y la puesta en marcha de una plataforma online para impartir cursos de capacitación de forma telemática accesible para las tripulaciones que están faenando en el mar y para personal en tierra”, señalan.
La sostenibilidad de las actividades pesqueras, segunda línea estratégica, busca el impulso de la economía circular, reduciendo la contaminación marina y promoviendo la reutilización de redes y utensilios plásticos; la descarbonización, a través de la modernización y transición energética de la flota, y el fomento de la actividad pesquera como fuente de alimentos sostenibles.
Por último, la tercera línea estratégica está orientada a impulsar la cohesión social y asegurar la continuidad del sector pesquero, fomentando la incorporación de la mujer a través del incremento del número de tituladas náuticas y su empleabilidad en buques pesqueros.
También quiere mejorar las condiciones a bordo, incrementando espacios para las tripulaciones, e implementar medidas de apoyo a la mejora de actitudes profesionales de los jóvenes, con iniciativas de fomento de incorporación de población menor de 35 años, así como facilitar la contratación de trabajadores de otros países.