Florencio Lasaga dio sus primeros pasos en El Corte Inglés en el departamento de contabilidad del centro comercial situado en la madrileña calle de Preciados allá por el año 1959. Escámez fue más precoz todavía, ya que arrancó su carrera profesional como botones en el Banco Internacional de Comercio de Águilas (Murcia), la población donde nació, con tan solo 12 años de edad.

Ambos no supieron lo que se conoce como cambiar de aires profesionalmente hablando. Los únicos pasillos laborales que pisaron fueron los de El Corte Inglés y el Banco Central (que absorbió en su momento al Banco Internacional de Comercio). La diferencia entre Lasaga y Escámez es que el primero no llegó a alcanzar el cargo de presidente. El segundo, sí.

Historia viva

Lo que nadie le puede quitar a Florencio Lasaga es el hecho de haber conocido a todos los presidentes de El Corte Inglés. Desde los conocidos como presidentes históricos (César Rodríguez González, Ramón Areces Rodríguez e Isidoro Álvarez Álvarez), hasta la actual Marta Álvarez Guil. Sin olvidar a Dimas Gimeno Álvarez o a Jesús Nuño de la Rosa. El triunvirato Rodríguez, Areces, Álvarez confió en él a pie juntillas durante sus respectivas presidencias.

“Depositaron en él toda su confianza para sincronizar e integrar la organización administrativa, en general, y la dirección financiera, en particular, con la actividad comercial e industrial que se ha desarrollado en el grupo de empresas”.

Estas palabras son de Federico Mayor Zaragoza, académico de Número de la Real Academia Nacional de Medicina. Las mismas las pronunció en 2018, durante la entrega de la Medalla de Honor a Florencio Lasaga como presidente de la Fundación Ramón Areces. También son suyas estas otras consideraciones: “Siempre sentado, así lo recuerdo, a la izquierda de don Ramón Areces, e Isidoro Álvarez a su derecha”.

Florencio Lasaga aterrizó en El Corte Inglés por ser economista de formación. Al puesto anteriormente citado, le vino con posterioridad el cargo de director de Administración (1963), otros nombramientos en empresas del grupo, para ser finalmente elegido miembro del consejo de administración en 1969. Puesto que ha abandonado tras presentar su dimisión esta semana. Ya había dejado la presidencia de la Fundación Ramón Areces el pasado mes de abril.

Vieja guardia

Florencio Lasaga conformó junto a Carlos Martínez Echevarría y Juan Hermoso el terceto de confianza de Isidoro Álvarez. Lasaga se ocupó de las filiales de la empresa; Martínez Echevarría, de las finanzas; y Hermoso, de las ventas y el márketing. A cuentagotas, fueron saliendo de El Corte Inglés.

El primero que abandonó la nave fue Martínez Echevarría tras casi tres décadas. Juan Hermoso hizo lo propio tras cuatro décadas. Florencio Lasaga lo hace después de estar 62 años dedicado a la causa de la firma del triángulo verde. A Lasaga y Martínez Echevarría los conocían como ‘el clan navarro’. Ambos habían nacido en esta comunidad autónoma.

Seis décadas en las que Florencio Lasaga ha vivido in situ la evolución de El Corte Inglés y las diferentes disputas familiares. En la última, entre Dimas Gimeno y las hermanas Marta y Cristina Álvarez, apoyó la salida del primero (siempre pensó que no estaba preparado para llevar las riendas, al igual que Martínez Echevarría) y apoyó a la hermanas. Juan Hermoso era de la opinión contraria. Este fue el primero que abandonó la nave.

Como suele decirse, tantos años en un mismo sitio dan para mucho. Lasaga ha vivido el despegue y la evolución de la distribución en primera persona. Desde la entrada de España en el Mercado Común hasta los efectos negativos en la compañía derivados de la pandemia, y que ha derivado en el primer ERE de su historia para 3.500 trabajadores.

Persona austera

El desempeño y la dedicación a la empresa de Florencio Lasaga no han tenido parangón. Eso sí, lo ha hecho sin teléfono móvil y sin ordenador. Austeridad es una palabra que siempre ha llevado por bandera desde el primer hasta el último día.

Otra curiosidad en su larga trayectoria es que acabó ocupando un puesto que estaba dedicado siempre al presidente de El Corte Inglés. Así, tras la muerte de Isidoro Álvarez, la Fundación Ramón Areces, que posee el 37% de las acciones de El Corte Inglés, le otorgó el sillón de mando de la institución por unanimidad.

Lasaga continuará como vocal, ya que la tradición ha vuelto a la Fundación Ramón Areces, ocupando el cargo de presidenta Marta Álvarez. Al contrario que Alfonso Escámez, Florencio Lasaga no llegó a ocupar el cargo de presidente. Quizás sea el único sueño que le ha faltado por cumplir en su dilatada y exitosa carrera en El Corte Inglés. Pero, desde luego, ha sido el discreto escudero que todos los presidentes de la firma han tenido a su lado.