Marta Ortega tomará este 1 de abril las riendas de Inditex como presidenta no ejecutiva. Ello supone la salida de Pablo Isla tras 17 años en la compañía y el inicio de una nueva era para el gigante textil, que sale bastante reforzado de la crisis de la pandemia, aunque con algunos retos y problemas ligados a la actualidad. 

El principal es la situación de sus tiendas en Rusia y Ucrania, cerradas temporalmente por el conflicto bélico desde el 5 de marzo. Hablamos del cierre del 9% del total de sus establecimientos (502 en Rusia y 79 en Ucrania) que suponen un 8,5% de su ebit y 5 puntos porcentuales del crecimiento de las ventas entre el 1 de febrero y el 13 de marzo. 

Quizás centrarse en otros mercados, como EEUU -el segundo más importante para la compañía-, ayude a amortiguar el golpe sufrido por la guerra. De hecho, es una opción que ya baraja la compañía.

Tienda de Zara en Moscú. Efe

Derivado de esto, hay otro gran problema con el que tendrá que lidiar Marta Ortega: la inflación, a la que no es ajena el grupo. De hecho, ya han anunciado que realizarán "ajustes selectivos" en determinados mercados si la situación lo requiere. Uno de ellos es el de España, para el que subirán un 2% los precios en la campaña primavera/verano. También se producirá el mismo incremento en Portugal.

Si seguimos en esta línea, la pérdida de valor de sus acciones es otro contratiempo para la nueva era de Inditex. El ascenso al poder de Marta Ortega en la firma textil no ha sentado muy bien en los mercados bursátiles. El día que se anunció su nombramiento, Inditex cayó un 6%, hasta los 27,86 euros por título. Este descenso supuso una erosión del valor en bolsa de 5.600 millones de euros. 

Ayer, además, a las puertas del relevo directivo Iberdrola desbancó a Inditex en el puesto de primera empresa por capitalización bursátil en el Ibex 35. La firma gallega cerró la jornada con una capitalización de 61.647 millones de euros, mientras que la energética lo hizo con 63.800 millones. Los títulos de la compañía cedieron un 5%, hasta los 19,7 euros. 

Venta 'online'

Y de los problemas a los retos. El más importante es la transformación online. En su último ejercicio fiscal, la venta online de Inditex creció un 14% para alcanzar los 7.500 millones de euros, un 25,5% de la venta total en 2021. Dato que se ha triplicado desde 2017. 

Recordemos que el plan de inversiones anunciado para el periodo 2020-2022 implica invertir 1.000 millones de euros en digitalización y 1.700 millones de euros para la plataforma integrada de tienda y online. Con ello, Inditex espera que el ecommerce supere el 30% de la venta total en 2024.

Sin embargo, esta estrategia también implicó el cierre de tiendas físicas. La optimización de las tiendas está en la fase final prevista (578 tiendas absorbidas en 2021). Al cierre del ejercicio Inditex operaba un total de 6.477 tiendas y prácticamente ha culminado el cierre de establecimientos. 

No estará sola

En esta nueva etapa, la hija de Amancio Ortega estará acompañada por el consejero delegado, Óscar García Maceiras, quien lleva ya en el cargo desde el pasado mes de noviembre, fecha en la que se anunciaron los cambios en la dirección de la firma.

La estrategia a seguir será continuista. Ya lo dijo Pablo Isla en diciembre y lo ratificó Maceiras. "El modelo de negocio de Inditex es muy sólido, tremendamente estable y a lo largo de los años ha sabido trasladarse", aseguró. 

Óscar García Maceiras.

En cuanto a sus honorarios, Marta Ortega cobrará un millón de euros. Por un lado, percibirá 900.000 euros de remuneración fija específica por el desempeño como presidenta no ejecutiva. Y en su calidad de consejera dominical y como el resto de vocales del consejo, recibirá un fijo anual de 100.000 euros más. 

Además, pocos días antes de asumir la presidencia, el Grupo Pontegadea, que reúne todas las sociedades de cartera propiedad de Amancio Ortega, sus filiales dedicadas al negocio inmobiliario y otras participaciones de carácter financiero, nombró a Marta la nueva consejera de la entidad y también de su filial en Reino Unido.

Cifras casi de récord

En la parte económica, Pablo Isla deja la compañía con datos casi de récord. La cadena textil registró un beneficio neto de 3.243 millones de euros al cierre de su año fiscal 2021-2022 (del 1 de febrero de 2021 al 31 de enero de 2022).

El grupo cerró con unas ventas de 27.716 millones de euros, un 36% más que en 2020. La venta a tipo de cambio constante creció un 37%. Esta cifra de ventas se obtuvo con un 5% menos de tiendas que en 2020 (13% menos frente a 2019). 

Si tenemos en cuenta que el pasado año la compañía cerró con 1.106 millones de beneficios, el resultado de este año es muy positivo. Triplica beneficios y devuelve a la compañía a cifras anteriores a la Covid, aunque no obtuvo el récord de ganancias que el mercado esperaba.