El paro de transportistas continúa y ya va por su vigésimo día consecutivo. La situación, tras el acuerdo del Gobierno con las patronales del sector ha mejorado, tanto que las grandes empresas han comenzado a recuperar su actividad y la movilización pierde fuerza. De hecho, este sábado se decide sobre su continuidad en una asamblea convocada en Madrid.
Esa pérdida de apoyos se nota en los datos del Ministerio de Transportes, que indican que el tráfico de movimiento de largo recorrido de vehículos pesados se mantuvo en la tercera semana del paro entre un 94% y un 98% respecto a un día normal. Es decir, prácticamente el tráfico del transporte por mercancías regresa a la normalidad.
Pero más concretamente pierde fuerza por el acuerdo alcanzado entre el Gobierno y las patronales del sector representadas por el Comité Nacional de Transporte por Carretera (CNTC) hace algo más de una semana. El acuerdo supuso que los profesionales de tres de las grandes patronales (Fenadismer, Fetransa y Feintra), que se unieron al paro de transportistas desde el martes 22 de marzo, dejaron de secundar las movilizaciones.
Cabe recordar que el acuerdo de 30 medidas, ya aprobado en el Consejo de Ministros, supone un esfuerzo presupuestario de más de 1.000 millones. La medida más importante es la bonificación de 0,20 euros por litro de combustible (gasóleo, gasolina, gas y adblue) que supondrá un ahorro de 700 euros al mes por camión.
De hecho, el presidente de la plataforma convocante del paro, Manuel Hernández, reconoció hace unos días que "las grandes empresas están trabajando" y que "una pequeña parte de autónomos bajo las amenazas totalmente condenables de sus cargadores se han puesto a trabajar en contra de su voluntad".
Y la prueba la tenemos en algunas comunidades autónomas. Por ejemplo, la asamblea extraordinaria de la Asociación de Transportistas de Navarra, Tradisna, decidió el pasado miércoles cesar en el apoyo al paro indefinido convocado por la Plataforma para la Defensa del Transporte. La misma decisión tomó la asamblea de Hiru (el sindicato vasco de transportistas autónomos).
Asimismo, la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) confirmó hace unos días que un 95% de los transportistas autónomos ya había comenzado a trabajar de nuevo.
Así, la Plataforma para la Defensa del Sector del Transporte de Mercancías por Carretera Nacional e Internacional ha convocado a todos los transportistas a una asamblea que se celebrará este 2 de abril a las 12:00 horas de la mañana en Madrid para decidir sobre el futuro de sus acciones.
Se recupera la actividad
Todo ello tiene un reflejo directo en uno de los sectores más afectados: la distribución, cuya actividad se recupera, aunque con problemas que elevan aún más el precio que la industria está pagando en este paro.
“Estamos mejor, pero sigue habiendo puntos calientes en los que permanecen los actos violentos”, reconocen fuentes del sector, que cifran en 2.500 camiones los saboteados por los transportistas parados. “Ahora vamos a ritmo de 30 o 40 por día”, añaden. Y eso que el Gobierno preparó un dispositivo con 23.500 agentes de Guardia Civil y Policía para evitar este tipo de actos.
Esto hace que la factura de los supermercados por el paro de los transportistas crezca. La pasada semana, la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (Asedas) cifró en 130 millones las pérdidas diarias de las empresas de distribución. Lo que eleva a más de 2.000 millones las pérdidas ocasionadas en las empresas de distribución desde que se inició el paro el 14 de marzo.
La factura de los supermercados incluye nuevos gastos: se traduce en destruir producto no vendido, costes adicionales por buscar nuevos proveedores o nuevos transportistas, daños en los camiones o contratación de más vigilancia para asegurar la operatividad, según detallan fuentes del sector a este medio.