En los próximos años Siemens Gamesa tendrá que remontar después de un año con no demasiada fortuna. Los retrasos en el norte de Europa, las contrariedades en el mercado indio y mexicano y la pandemia, dieron malos resultados al gigante hispano-germano, por eso ahora su foco está en "crecer más rápido que el mercado".
Para la compañía la prioridad será la rentabilidad sobre el volumen, la generación de caja, así como la eficiencia y productividad en todas las operaciones.
Esas son algunas de las conclusiones de la presentación de su hoja de ruta para los próximos dos años, pero también se centrará especialmente en las oportunidades de crecimiento en sus negocios rentables de offshore (eólica marina) y Servicios (mantenimiento de parques) y cambiará el rumbo en eólica terrestre.
Precisamente por eso, Andreas Nauen, consejero delegado (CEO) de Siemens Gamesa, en el encuentro con la prensa, a las preguntas de Invertia sobre si se va a fabricar para eólica marina en las plantas de España, ha respondido que "el negocio offshore está en Reino Unido, norte de Europa, Asia y EEUU", y que es por eso por lo que llegarán a acuerdos para la producción de su nueva máquina offshore SG 14-222 DD con proveedores en EEUU, Reino Unido y Taiwán".
En este contexto de potencial de crecimiento, se prevén instalaciones superiores a 180 GW entre 2020 y 2030.
España, fuera de la eólica marina
España, por tanto, se queda fuera de producir para eólica marina, y sus fábricas seguirán con modelos para eólica terrestre, un negocio que para la compañía está inmerso en un cambio de rumbo y en el que habrá expectativas de posibles reducciones de empleo, pero sobre todo enfocado al mercado indio.
“Ha sido un periodo difícil para la industria y la compañía, pero estoy seguro de que tenemos todos los componentes adecuados. Nuestra gente, tecnología, escala y presencia global son unas bases sólidas sobre las que construir nuestro liderazgo a largo plazo”, ha dicho Nauen.
“Contamos con una fuerte y rentable posición competitiva en los crecientes mercados de offshore y Servicios, y un significativo potencial en onshore que llevaremos a cabo tras el proceso de cambio de rumbo que ya está en marcha”, ha explicado Nauen, “hemos anunciado un nuevo equipo directivo para dirigir este cambio de rumbo. Además, a través de nuestro nuevo accionista de referencia, Siemens Energy, formaremos parte de un líder energético, y esperamos poder beneficiarnos de un fuerte potencial de sinergias”.
Las previsiones de la industria eólica terrestre contemplan una demanda estable a largo plazo, con un alto nivel de instalaciones anuales estimadas de 55 GW hasta 2025, creciendo hasta más de 65 GW en 2030, por eso, su objetivo es reducir el perfil de riesgo de este modelo de negocio.
La estrategia de reciclaje, clave en Europa
La compañía, resultado de la fusión de la alemana Siemens y la española Gamesa en junio de 2016, ha experimentado muchos cambios en estos últimos cuatro años, y la próxima será con la integración del 67% en Siemens Energy y su salida a bolsa a finales de septiembre.
Pero habrá más. Según la compañía, en un contexto en el que los márgenes de los fabricantes de aerogeneradores se han visto erosionados por factores externos -como la introducción de las subastas, las tensiones comerciales globales o la disrupción causada por la Covid-19- las perspectivas a largo plazo de la energía eólica son muy favorables, pero hay que tener en cuenta medidas de sostenibilidad.
Según explican en el comunicado de prensa, la sostenibilidad está en el centro del modelo de negocio de Siemens Gamesa y las plantas de reciclaje se han incluido específicamente como parte de la estrategia de la UE.
Esto supone que se potenciará las plantas que se dedican a la reparación de turbinas eólicas en el Viejo Continente.
Una estrategia que ha convencido a pocos
La hoja de ruta no ha debido de convencer a los inversores según se ha reflejado en el movimiento del mercado bursátil. La acción cerró el día con una caída del 4,56%, desde los 23,30 a los 22,20 euros.
Según los analistas consultados por este diario, lo más probable sea una toma de beneficios, porque los dividendos que ofrece el gigante eólico para 2023 son muy positivos, además de las expectativas de crecimiento y beneficios.
Sin embargo, hay otras voces que señalan que el plan de negocio para los próximos dos años no ha convencido y habrá que esperar a la evolución de la compañía para comprobar que marcha en la buena dirección.