Durante la presentación del Plan Estratégico de Respol 2021-2025, ha tenido lugar una manifestación por parte de la representación de los trabajadores de Repsol, que muestran así su indignación respecto a las últimas decisiones de la empresa.
Las protestas han comenzado a las doce de la mañana y se han prolongado hasta la una y media, en el Campus de Repsol, en la calle Méndez Álvaro nº44 de Madrid.
Según los sindicatos convocantes, la compañía ha presentado su plan sin contar en absoluto con sus trabajadores. "El enfado ha ido creciendo hasta decir basta", dice el comunicado.
Y es por ello que los sindicatos de CCOO de Industria y UGT FICA han convocado la concentración, que ha acogido a delegados y delegadas de todos los rincones de España, para defender a la plantilla de Repsol, que consta de alrededor de unas 16.000 personas.
“Hoy se presenta un Plan Estratégico encaminado a una gran Transición Energética de Repsol que no ha contado con la participación de la parte trabajadora. Este modelo de Relación Laboral, basado en un continuo recorte de costes a corto plazo, reducción de plantilla propia y descuido de la viabilidad a futuro de los negocios, no se puede mantener en el tiempo en una compañía como Repsol”, señalan.
Ambos sindicatos exigen a la compañía que recupere el antiguo modelo de relaciones laborales, y defienden que la plantilla debe participar en el diseño y en la implantación de la hoja de ruta, y más en un momento tan complicado como el actual, en plena pandemia por la COVID-19.
“Desde la representación de los trabajadores siempre hemos apostado por buscar soluciones a través del diálogo; si bien desde hace un tiempo, la Dirección de la Compañía está adoptando decisiones unilaterales en contra de los intereses de los trabajadores y trabajadoras, incumpliendo compromisos y acuerdos adquiridos, utilizando como excusa la situación coyuntural de pandemia”, manifiestan.
La plantilla reconoce que, en comparación con años anteriores, ha habido una importante disminución en cuanto a los resultados, pero también destaca que los beneficios en el tercer trimestre han llegado a los 196 millones de euros, se ha reducido la deuda en 800 millones, y se está realizando un gasto importante en ajustes de plantilla.
Imaz no anuncia ajustes
Sorprende las declaraciones de los sindicatos, cuando el consejero delegado, Josu Jon Imaz, durante la presentación del plan, pese a no descartar ajustes puntuales en la plantilla del grupo con el fin de "ser más eficientes", no ha anunciado ninguno en marcha.
"Defenderemos la industria en España con uñas y dientes". Y subrayó que las inversiones de Repsol en el país ayudarán a "reforzar la competitividad de la industria española y a la descarbonización".
"Siempre estaremos atentos a reducir el coste de las operaciones, a reducir el coste energético y a optimizar el mantenimiento de nuestra actividad industrial". Sin embargo, "vemos a las personas de Repsol como un activo importante y si hay momentos en que una planta determinada tiene que tener ajustes para hacerla más competitiva, hay otros negocios en los que avanzaremos y podemos buscar adaptaciones".