Con motivo de la celebración de la Cumbre de la Ambición Climática de la ONU, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha presentado la Estrategia de Descarbonización a Largo Plazo (ELP) aprobada hace tan solo un mes.
Esta Cumbre, organizada por Naciones Unidas (ONU), Reino Unido, Francia, Chile e Italia, tiene lugar cinco años después de la adopción del histórico Acuerdo Climático de París. En esta ocasión, ha reunido a líderes políticos de 71 países de todo el mundo, así como del sector privado y la sociedad civil, para presentar compromisos climáticos más ambiciosos y de alta calidad, y medidas para limitar el calentamiento global a 1,5°C y elevar el nivel de ambición antes de la COP26 de Glasgow de noviembre 2021.
"España está comprometida en la lucha contra el cambio climático y desde este Gobierno hemos iniciado el proceso de transformación", ha dicho en una intervención online. "En enero declaramos la emergencia climática, en mayo presentamos la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, en septiembre la Ley de Adaptación al cambio climático y hoy anunciamos la Estrategia de Descarbonización".
El jefe del Ejecutivo, durante su intervención, ha destacado que “la emergencia climática es el mayor desafío de nuestra civilización. Debemos entender, por tanto, que la acción climática no es solo una inversión potencial para nuestras economías, que lo es, sino una obligación para la seguridad de nuestros ciudadanos y ciudadanas, y también, una garantía de futuro para las próximas generaciones”.
Las medidas del Gobierno de España, con perspectiva de equidad y justicia social, prestan especial atención a los colectivos y sectores vulnerables, y a los habitantes de zonas en declive demográfico.
Esta declaración se alinea con la decisión del Consejo Europeo de ayer de ampliar la reducción de emisiones del 40% al 55% para 2030, para alcanzar la neutralidad climática en 2050. En octubre de este año, España ya se comprometió, junto a 10 Estados Miembros, a alcanzar este objetivo.
El Gobierno prevé que en 2030 haya 5 millones de vehículos eléctricos en España y que el 25% del consumo energético industrial proceda del hidrógeno verde en 2050. Nuestras medidas buscan reducir el consumo un 50%, siendo más eficientes, y que el 97% sea de origen renovable.
Sánchez ha destacado que estas transformaciones “exigen decisiones difíciles”, especialmente para sectores como las centrales térmicas y las nucleares y la minería del carbón. Por este motivo, se ha aprobado la Estrategia de Transición Justa, “para asegurarnos de que nadie quede atrás”.
“Esta estrategia es una apuesta colectiva por un mundo diferente en el que nuestras casas, nuestros edificios públicos, nuestros coches y nuestros medios de transporte, las oficinas y las fábricas estarán diseñados para contribuir al objetivo último de la neutralidad climática, al objetivo último, en definitiva, de salvar nuestro planeta. Por esto trabajamos”, ha concluido el presidente.