La Asociación Empresarial Eólica (AEE) considera que el momento actual representa "una gran oportunidad" para explotar el gran potencial de eólica marina existente en España, especialmente a través del avance que ha experimentado la tecnología flotante en los últimos años.
En un comunicado, la patronal afirma que la situación actual de la tecnología de eólica flotante permite ya "la instalación de grandes parques comerciales, lo que además puede compaginarse con el impulso de parques demostrativos que apoyen la validación de las tecnologías flotantes españolas en curso de desarrollo".
Según datos del último informe sobre eólica marina en Europa de WindEurope, la patronal del sector eólico europeo, el Viejo Continente ha incrementado en 2020 en 2,9 gigavatios (GW) la potencia en la tecnología 'offshore'. Esto equivale a 356 nuevos aerogeneradores conectados a la red en nueve parques eólicos 'offshore'. Europa cuenta actualmente con una potencia total instalada de 25 GW de eólica marina en 12 países.
Asimismo, según las previsiones de Irena, para cumplir con los objetivos del Acuerdo de París, la potencia total de eólica marina necesaria a nivel mundial deberá ser de 228 GW en 2030 y de 1.000 GW en 2050. Según la AIE, la eólica marina supondrá la mitad de la generación eléctrica instalada en Europa.
En este sentido, AEE afirma que España cuenta con 6.000 kilómetros de costa en los que existe recurso eólico "estable y abundante", pero, por diversos factores, la eólica marina apenas ha tenido desarrollo. Solo hay algunos proyectos puntuales de investigación, en contraste con la terrestre y con otros países europeos que sí están apostado fuertemente por esta tecnología, en línea con el objetivo estratégico de la UE de consolidarse como líderes mundiales en ella.
Así, la patronal considera que España tiene la oportunidad de capitalizar las ventajas de ser un 'first mover' "para maximizar los beneficios económicos locales de una cadena de suministro naciente en esta industria".
De esta manera, AEE cree que la implementación de las políticas de lucha contra el cambio climático y transición energética, junto con las capacidades industriales de los sectores eólico y naval, el interés real de los inversores y la fuerte reducción de costes, "convierten al momento actual en una gran oportunidad para explotar el gran potencial de eólica marina existente en el país".
A este respecto, subraya que el avance que ha experimentado la eólica flotante en los últimos años constituye un vector de desarrollo adicional para España, "al abrir la puerta a nuevos emplazamientos más alejados de la costa, con factores de capacidad muy elevados, y que permiten una disminución sustancial del impacto ambiental y visual respecto a los proyectos presentados hace más de una década".
Estrategia ambiciosa
Sin embargo, subraya que sin una estrategia "clara y ambiciosa", con acciones concretas en el corto plazo, esta oportunidad se diluirá en favor de otros países europeos que ya se encuentran desarrollando el mercado y disponen de instrumentos de apoyo específicos.
De esta manera, AEE ve necesaria la aprobación de la Estrategia de Eólica Marina y Energías del Mar en el corto plazo, con unos objetivos concretos como se han incluido en otras estrategias u hojas de ruta, así como actualizar el marco regulatorio y avanzar en el diseño de subastas concretas para esta tecnología, para que sean convocadas en el plazo de tiempo "más corto posible".