Fracasa el cambio de hábitos en el consumo de la luz, la factura contiene sus precios por la bajada del IVA
Gracias a la rebaja del 21% al 10% del impuesto sobre el valor añadido, el mes de julio incluso es más barato que enero, el de la borrasca Filomena.
31 julio, 2021 00:54Noticias relacionadas
La decisión de bajar el IVA del 21% al 10% desde el 26 de junio hasta final de año ha conseguido salvar los muebles para los contratos PVPC (Precio Voluntario al Pequeño Consumidor), es decir, para una buena parte de los hogares en España. La factura de la luz del mes de julio ha caído ligeramente respecto a la de enero, en plena ola de frío y de la borrasca Filomena, pese a que se viven precios históricamente altos en el mercado mayorista.
Ha influido menos el nuevo modelo de tarifa en función de la hora del día (punta, llano y valle), que pretendía modificar los hábitos de consumo energético.
Según datos del comparador de la CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia), el mes de julio ha sido el más caro en su tramo variable, donde se incluye el coste de la energía, pero la reducción del impuesto sobre el valor añadido ha conseguido que no saltaran las alarmas.
Este simulador toma como ejemplo un hogar típico en el mercado regulado (PVPC), con 3,45 kW de potencia contratada y un consumo de 3.000 kWh al año. El porcentaje de consumidores en el mercado regulado es del 39,89%, es decir, unos 10,7 millones de hogares o pymes con menos de 10 kW de potencia contratada. El resto está en el mercado libre.
Ese consumidor tipo acogido al PVPC este año ha visto incrementada su factura respecto al promedio de los 5 años anteriores. El único mes que se vivieron precios bajos fue febrero, con una factura media de 49,66 euros. A partir de ahí, en marzo subió 8,57 euros (un 17% más), en abril 8,32 euros más (un 14% más que marzo) y en mayo llegó al tope con 67,46 euros (un 6,6% más).
Y junio hubiera superado a mayo pero el cambio normativo y la rebaja del IVA (los últimos cuatro días del mes), contuvo el precio final en los 61,92 euros, lo mismo que julio, con 59,90 euros.
PVPC vs mercado libre
Los hogares pueden escoger entre estar en el mercado regulado (PVPC), que está indexado a los precios diarios del mercado mayorista de electricidad (spot) o en el mercado libre, donde cada comercializadora tiene diferentes ofertas de contratos de luz.
El precio spot afecta al 35% de la factura de un cliente tipo PVPC (el resto son peajes por el uso de la red, impuestos y otros cargos). El precio promedio del spot junio fue de 88 euros/MWh, lo que supone 40 euros/MWh más respecto al promedio del mismo mes en los últimos 5 años. Y en la factura esto supone 8,5 euros más.
Sin embargo, para el cliente del mercado libre la reducción del 11% del IVA (aplicada a toda la factura) supone 4,5 euros menos de media y por tanto para estos hogares supone una reducción en la factura pero sin sufrir la subida del mercado spot.
Diferencias con 2020
El pasado año con el IVA de la luz en el 21%, la factura media en junio de 2020 fue de 49,13 euros y este año 61,92 euros.
Por lo tanto, que la rebaja del IVA no se traduzca en una mayor bajada en el recibo de la luz se debe a los altos precios eléctricos registrados en nuestro país y que se reflejan entre otros, en la subida del término variable.
Cabe destacar que a pesar de que en los últimos meses de junio y julio, se han llevado a cabo cargos por consumos dependiendo de la franja horaria (punta, llano y valle), no se ha conseguido que los términos variables de las facturas se reduzcan y esto es debido también al coste récord de la energía.
Impuesto eléctrico
Por otro lado, desde el 1 de julio entró en vigor la suspensión del Impuesto sobre el Valor de la Producción de Energía Eléctrica (IVPEE). Un tributo que carga la generación de electricidad pero que no repercute directamente en la factura de la luz.
Por el momento, el precio de la electricidad en el mercado mayorista sigue por las nubes. Y aunque los generadores ya no incluyan en sus costes el IVPEE, el precio del gas en el mercado internacional (que ha llegado a los 40 euros/MWh en el TTF holandés) y el del CO2 son los que marcan el paso.
Aún así, pese a que son precios internacionales, España paga más por la luz que sus vecinos europeos como Holanda, Bélgica y Alemania. El gas en nuestro país es el más caro de Europa (en más de 2 €/MWh que se convierten en más de 4 €/MWh eléctricos), siempre en términos de mercado mayorista.
Está por ver si los cambios regulatorios que ha anunciado el Gobierno consiguen su objetivo, que la economía española no se resienta por los altos costes energéticos.