Las grandes eléctricas, Iberdrola, Endesa y EDP, siguen en su campaña de reacción ante las medidas aprobadas por el Gobierno para bajar el precio de la luz. Es su última campaña para evitar que tengan que perder 2.600 millones de euros de sus beneficios.
En una carta al vicepresidente europeo, Frans Timmermans, y apoyada por Global Infrastructure Investors Association (GIIA), una red mundial de empresas de asesoramiento, bancos, bufetes y fondos de inversión, señalan que "pone en peligro los objetivos" de los grandes pactos verdes de transición energética y de reducción de emisiones de la Unión Europea.
Un fuerte revés al gran impulsor del Green New Deal que hacía pocos días decía a las eléctricas que dejaran de llorar y asumieran su responsabilidad en la descarbonización de la economía.
La decisión se produce al mismo tiempo que Iberdrola anunciara que iba a paralizar los procesos de licitación en curso de bienes y servicios asociados a la construcción de nuevos proyectos renovables en España hasta evaluar en detalle de la viabilidad económica de dichos proyectos.
Aunque ciertamente quedan excluidos los proyectos bajo el marco retributivo de estas subastas de renovables.
Pérdidas de 3.200 millones
Inicialmente el Ejecutivo había calculado unos ingresos de los beneficios de las eléctricas de unos 2.600 millones de euros, pero la agencia de calificación crediticia S&P Global ha alertado de que serán muy superiores.
En concreto, suman un recorte en los beneficios de las compañías eléctricas de cerca de 3.200 millones de euros, lo que amenaza con ralentizar los objetivos de transición energética del país.
En un informe publicado este jueves, la calificadora de riesgos considera que las nuevas medidas "podrían reducir el apetito de las empresas de generación de energía de invertir en la transición energética".
S&P también ha señalado que España ha sido el único país europeo que ha adoptado unas medidas de este tipo.