Las organizaciones Oil Change International y Overseas Development Institute han publicado una investigación ("Export finance for the past or the future?") que muestra que de los países de la iniciativa Export Finance for Future (E3F), España es el mayor proveedor de financiación de combustibles fósiles en el extranjero. E3F está formada, además de nuestro país, por Dinamarca, Francia, Alemania, Países Bajos, Suecia y Reino Unido.
Todos ellos destinaron 19.000 millones de euros en financiar exportaciones para proyectos de combustibles fósiles en el extranjero entre 2018 y 2020. Esta cifra fue significativamente mayor que su apoyo a los proyectos de energía limpia (16.500 millones de euros).
Y España ocupa el primer puesto en este ránking. Ha sido el mayor proveedor, con 6.200 millones de euros, seguida de Alemania, con 5.000 millones de euros, y el Reino Unido, con 3.700 millones de euros entre 2018 y 2020. Los Países Bajos y Francia aportaron 2.600 millones de euros y 885 millones de euros durante el mismo período.
Las pruebas manejadas por el equipo de investigación de Oil Change International muestran que los países del E3F han apoyado o están considerando apoyar proyectos de combustibles fósiles, como un plan de infraestructuras de gas en Mozambique y explotar GNL (gas natural licuado) en el Ártico en la zona de soberanía de Rusia.
Además, algunos países del E3F han seguido apoyando proyectos de carbón, a pesar de los compromisos de poner fin a la financiación de sus exportaciones.
Compromiso en la COP26
Este informe contrasta con las posiciones de los diferentes miembros del E3F durante la Cumbre Climática de Glasgow (COP26). Todos ellos se unieron a un compromiso de 39 países e instituciones para poner fin a la financiación pública internacional del petróleo, el gas y el carbón sin restricciones para finales de 2022 y, en su lugar, dar prioridad a la financiación pública de las energías limpias.
Según Oil Change, como líderes autoproclamados y para alinearse realmente con el objetivo de máxima subida de la temperatura del planeta de 1,5ºC, los países del E3F deben poner fin inmediatamente a la financiación de nuevas exportaciones para proyectos de combustibles fósiles y deben asegurarse de que ellos y otros signatarios pongan en práctica este compromiso de manera efectiva y evitando lagunas.
Los países del E3F también deberían emprender una diplomacia específica para arraigar sus compromisos en los procesos políticos multilaterales existentes, como por ejemplo mediante la adopción de restricciones significativas a la financiación de las exportaciones de petróleo y gas en la OCDE. Este es un paso necesario para que los países rezagados, como Japón, Corea, China y Australia, sigan su ejemplo.
"Gracias a la importante presión pública, todos los países de Export Finance for Future se comprometieron finalmente a dejar de financiar el pasado en Glasgow", señala Laurie van der Burg, co-directora de la campaña mundial de finanzas públicas de Oil Change International.
"Ahora necesitamos que estos países hagan realidad su compromiso de dejar de financiar las exportaciones de proyectos de combustibles fósiles y de destinar este dinero a proyectos de energía limpia. La ciencia les obliga a hacerlo sin demora, y no dentro de un año".
"Las conclusiones de nuestro informe muestran que, al cumplir sus recientes compromisos, los países de la Export Finance for Future tienen que llevar a cabo una importante transformación", añade Nandini Sharma, responsable de investigación del Overseas Development Institute.
"Hay signos alentadores, como el hecho de que Suecia y Dinamarca ya estén proporcionando mayores niveles de financiación para las energías limpias, pero otros deben seguir su ejemplo para canalizar su apoyo desde los combustibles fósiles hacia las energías renovables, y dar ejemplo a los demás".
Origen de E3F
La coalición E3F se formó en la primavera de este año para "alinear la financiación de las exportaciones con los objetivos climáticos", pero estableció solo objetivos lejanos para poner fin a la financiación de los combustibles fósiles.
Los países del E3F dicen que quieren financiar el futuro, no el pasado. Por lo tanto, el informe recomienda a estas naciones que no esperen hasta fines de 2022 para cumplir con su compromiso de Glasgow y que acuerden detener de inmediato el financiamiento de nuevos combustibles fósiles.
Posición del Gobierno español
El Ministerio para la Transición Ecológica se ha puesto en contacto con este diario para explicar que "el Gobierno de España tiene un compromiso claro con la descarbonización y con el fin de la financiación de combustibles fósiles. Desde 2020, España ya no financia carbón con ninguno de sus instrumentos de financiación internacional y ahora trabaja para acabar también con los subsidios a otros combustibles fósiles".
Además, recuerda que "la Ley de Cambio Climático establece que en los próximos años dejaremos de financiar completamente cualquier tipo de combustible fósil. Se trata de una obligación vinculante".
Y por otro lado, en la Cumbre de Glasgow "hemos suscrito un compromiso para poner fin a la financiación pública del carbón, el petróleo y el gas en el extranjero para finales de 2022 que pone de firme manifiesto el trabajo que se está haciendo para alinear todos sus instrumentos de financiación pública con los objetivos de clima y alcanzar la plena descarbonización".
De hecho, "este es el primer compromiso que aborda el petróleo y el gas además del carbón, e implica que las instituciones financieras públicas españolas, incluidas aquellas que financian créditos a la exportación, tendrán que poner fin a esta financiación para finales de 2022".