La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha mostrado su confianza para acordar este martes la reforma del mercado eléctrico de la Unión Europea con un amplio consenso de los Veintisiete que incluya también a Francia y Alemania, los países más polarizados en este debate.
"Si hace falta, nos quedaremos a cenar y a dormir pero no contemplo la posibilidad de no llegar a un acuerdo hoy", ha incidido a su llegada a la reunión de ministros de Energía que se celebra este martes en Luxemburgo.
La decisión de este lunes requiere de una mayoría cualificada, lo que permite dejar fuera a países reticentes en pos del acuerdo, aunque Ribera ha descartado, en principio, esta posibilidad ya que le gustaría que esta fuese respaldada por consenso de todas las delegaciones.
"Mi impresión es que no hay nada que impida que eso sea así", ha apostillado.
Los ministros abordarán cómo perfilar los precios para los consumidores y hasta qué punto algunos mecanismos pueden contribuir y cambiar dependiendo del mix energético de cada país.
"Esta es una de las perspectivas delicadas que debemos abordar con sabiduría para asegurar que no creamos marcos inadecuados para nadie al tiempo que se garantiza la transparencia sin comprometer la igualdad de condiciones", ha indicado la vicepresidenta.
Consciente del complejo debate que genera este expediente, la presidencia española pretende ser, según ha explicado la ministra, "un árbitro comprometido con el interés europeo" pero sin dejar de respetar las diferentes realidades nacionales. Es lo que sucede con las grandes economías de la UE, Francia y Alemania, que pueden tener una "sensibilidad mayor a la manera en que acabe redactado el texto".
En cualquier caso, Ribera considera que las preocupaciones y prioridades de los Estados miembro están "bien definidas" y se ha mostrado "optimista" de cara a lograr un acuerdo, ya que el consenso es que resulta "capital" cerrar este expediente cuanto antes.
"Soy optimista y creo que todo el mundo tiene claro que debemos no solo llegar a un acuerdo sino que este no debe generar diferencias, discrepancias o desequilibrios que quiebren unas reglas comunes en el conjunto del mercado interior de la electricidad", ha explicado.
Esta es la séptima propuesta en la que trabajarán los ministros después de su intento fallido de acuerdo el pasado mes de junio, aún bajo la presidencia sueca del Consejo, pero que según ha apuntado Ribera cosechó ya un "Importante apoyo" en la reunión del pasado viernes a nivel de embajadores.