Mattias Frumerie, embajador sueco del clima: "La energía nuclear es necesaria para reducir las emisiones de CO2"
"Quiero destacar el excelente liderazgo de Teresa Ribera en la pasada Cumbre del Clima, quien con mucha fuerza nos guió en una difícil situación".
28 abril, 2024 02:46Suecia se encuentra entre los países de la OCDE con uno de los mejores planes de acción en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, en gran parte gracias a un marco político integral y políticas relativamente eficientes. Y no sólo está apostando por las energías renovables, sino también por la nuclear.
Pero el largo historial de este país escandinavo como líder climático se está cuestionando en los últimos dos años, por los cambios de políticas, especialmente en el objetivo de reducción de CO2 para 2030. Los nuevos planes podrían hacer que fracasara, a menos que el país compense con nuevas medidas más ambiciosas.
Por eso, cobra cada vez más importancia figuras como la de Mattias Frumerie, embajador climático y jefe de Delegación ante la CMNUCC (Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático) en el Ministerio Sueco de Clima y Empresa.
Frumerie participó en el Foro Hispano-Sueco para una cadena de valor verde y resiliente, celebrado en la Embajada de Suecia en España, y EL ESPAÑOL-Invertia tuvo la ocasión de hablar con él para conocer de cerca cuáles son las funciones de un embajador del clima.
"Es una buena pregunta que debo hacerme para asegurarme de que estoy haciendo lo correcto", explica Mattias Frumerie a este diario. "En última instancia, mi trabajo consiste básicamente en alentar a más países a ser aún más ambiciosos en sus objetivos climáticos".
En su opinión, "todos debemos hacer más en lo que respecta a la acción climática", por lo que su trabajo consiste en "entablar un diálogo con nuestros países socios para alentarlos e inspirarlos a hacer más".
Pero reconoce que "si hay suerte", el objetivo es "poder mostrar las soluciones que están disponibles y apoyar a las empresas suecas en el trabajo que están haciendo y en las soluciones limpias que pueden ofrecer". Así que su labor es reunir a todos los distintos tipos de actores suecos que trabajan en esta línea para garantizar poder ser aún más ambiciosos.
Energía nuclear y clima
El Gobierno sueco apuesta por la energía nuclear y planea triplicar su producción en las próximas décadas. La reforma legislativa, que se espera entre en los próximos meses, permitirá la construcción de nuevos reactores nucleares.
"Podemos ver que dentro de Europa tenemos un número cada vez mayor de países que están comprometidos con la energía nuclear, y algunos países que se oponen mucho al uso de la energía nuclear. No siempre es fácil llegar a una posición común como Europa en lo que respecta a la energía nuclear", señala Frumerie.
"Pero el Gobierno sueco, que asumió el poder ahora casi hace un año y medio, está muy comprometido también en garantizar que podamos utilizar la energía nuclear. Hoy en día una gran parte de nuestro sistema energético es nuclear y vemos la necesidad de aumentarlo. Creo que también estamos interactuando más con socios a nivel mundial", asegura Frumerie.
El experto climático explica la firma de Suecia de dos declaraciones en la COP28 en términos de garantizar que "la energía nuclear sea, por un lado, segura, pero también que esté más disponible".
El Gobierno del país nórdico considera que al menos diez nuevas unidades nucleares convencionales deberán estar funcionando en las décadas de 2030 y 2040 para lograr los objetivos que se han marcado y se basan en el informe que han recibido de la Agencia de Seguridad Radiológica.
Frumerie cree que se vive un punto de inflexión para lograr la neutralidad climática, para lo que abogó por un diálogo continuado, "no sólo público-privado, sino también entre sectores y países" que impulse la transición verde.
Política, finanzas y tecnología
El representante climático sueco asegura que se debe trabajar en tres ejes simultáneamente: el de las políticas, el de la financiación y el de las tecnologías; y aseguró que el avance en este recorrido hacia la sostenibilidad global será "digital y verde" a partes iguales.
Sin embargo, reconoció que "aún existe una brecha muy grande" entre las metas propuestas y los avances alcanzados en la actualidad, por lo cual se declaró a favor de proponer "soluciones escaladas a cada país y que, además, sean accesibles" para todos.
Pero ¿qué ocurrirá a partir de las Elecciones Europeas del mes de junio y la nueva composición de la Comisión Europea? "Es importante que todos los que participamos en la acción climática hagamos oír nuestra voz. Hay que crear conciencia sobre las oportunidades de la transición y lo que vemos que trae en términos de nuevos empleos y crecimiento", explica Frumerie.
"Y, por supuesto, garantizar que no sólo los países o las empresas, sino también las personas, estén lo suficientemente seguros para participar en la transición y que todos puedan ver cuál es su papel, y qué papel tendrá cada uno de nosotros en esta nueva economía que se está construyendo", puntualiza.
Aun así reconoce que el gobierno tiene una responsabilidad especial, proporciona ese liderazgo y crea esa seguridad para sus ciudadanos.
"Debe asegurarnos de que vamos a tener una buena calidad de vida y, básicamente, debe cuidarnos, con capacitación disponible, educación disponible, seguridad social y que esté disponible para aquellos que tienen que hacer la transición a la nueva economía".
Respecto a la futura formación de la Comisión Europea, "cuando llegue", se encontrará con lo que "llamamos la agenda estratégica, que los gobiernos europeos presentarán a la nueva comisión". Y ahí se integrarán "nuestras expectativas", dice Frumerie.
"Desde una perspectiva sueca, estamos dando al clima un lugar muy alto en esa agenda para asegurarnos de que continuaremos trabajando en ello también desde el nivel europeo y asegurando que podemos cumplir como Europa nuestros objetivos".
La COP28 y Ribera
Mattias Frumerie también ha sido testigo de las arduas negociaciones que se llevaron a cabo en la última Cumbre del Clima, la COP28, celebrada en Abu Dabi.
"Quiero resaltar, ya que estoy en Madrid, el excelente liderazgo que tuvimos por parte de la presidencia española de la UE en ese momento, y no menos importante, a la propia ministra Teresa Ribera, quien con mucha fuerza nos guio a través de una situación difícil".
Su posición "se debe a la larga experiencia que ella tiene y, por supuesto, con todo su equipo, junto al resto de mis compañeros europeos", reconoce el embajador sueco. La decisión de la COP28 es realizar una transición para alejarse de los combustibles fósiles y triplicar las energías renovables y duplicar la eficiencia energética.
"Fue una decisión difícil de tomar, pero también debemos resaltar el papel que desempeñaron todos los países que tienen combustibles fósiles. Arabia Saudí es uno de ellos. Por supuesto, el compromiso también es para ellos".
A la pregunta de si cree que la posición de los saudíes, exportador número uno de petróleo crudo del mundo, es 'greenwashing', Frumerie lo tiene claro.
"A nosotros, tanto desde la perspectiva sueca como desde la perspectiva europea, nos conviene asegurarnos de que estamos trabajando junto con países como Arabia Saudí para trabajar en su transición y que abandonen los combustibles fósiles".
"No sólo, por supuesto, para su propio sistema energético, sino como productores y exportadores de combustibles fósiles. ¿Cómo construyen su nueva economía? ¿Cómo desarrollan nuevas fuentes de ingresos para garantizar que luego puedan eliminar progresivamente su dependencia de los combustibles fósiles en su economía?", se pregunta.
NEOM Green Hydrogen Project
Y puso como ejemplo su estancia en la capital saudí de Riad un par de semanas antes de la COP para reunirse con varios actores empresariales que están desarrollando el proyecto llamado NEOM Green Hydrogen Project.
Es un proyecto del tamaño de Bélgica en la Costa Roja, donde están construyendo una nueva zona de infraestructuras. "La cantidad de cemento verde que tienen que adquirir no pueden encontrarla en el mercado, pero quieren utilizarla para garantizar que este nuevo desarrollo es climáticamente neutro".
"Por supuesto, la magnitud de ese desarrollo abarca varios años y, por supuesto, no todo es fácil. Pero creo que también muestra cómo un país como Arabia Saudí también está construyendo su propia nueva economía.
En definitiva, "si queremos ser parte de la transición hacia el cero neto, debemos asegurarnos de que el G20 esté reduciendo sus emisiones", ya que suponen el 80% de las emisiones de CO2 del mundo. Por lo tanto, son los países objetivo clave. "Pero, por supuesto, también hay que trabajar con los países más vulnerables, muchos países africanos, países más pequeños que ya están experimentando los efectos del cambio climático".