Durante más de una década, Abengoa participó en el desarrollo de proyectos de referencia mundial en Marruecos. Principalmente, en la implementación de tecnologías innovadoras en la desalinización y la gestión eficiente del agua. Actualmente, ha cogido el testigo Coxabengoa, que cuenta en el país vecino con importantes actividades en el sector del agua y con desarrollo en el campo de energías renovables. 

Coxabengoa es una nueva empresa fruto de la adquisición por parte de Cox de los activos productivos de la antigua Abengoa, desde 2023. En esta nueva etapa, opera dos concesiones de agua en Agadir y desarrolla dos proyectos de energía fotovoltaica por un total de 450 MW en Marruecos. “Coxabengoa aprovechará las oportunidades que se presenten en Marruecos, como ocurre con otros mercados de interés. Tanto en agua y en generación y transmisión de energía”, afirmó la empresa española a una consulta de EL ESPAÑOL.

Cabe destacar el proyecto de la desaladora de Agadir, diseñada y construida íntegramente con tecnología propia. La planta tiene una capacidad actual de 275.000 m3/día y su producción va destinada al uso combinado de agua potable (150.000 m3/día para abastecer a una población de 1,6 millones de habitantes) y de agua para riego (125.000 m3/día para proveer a una superficie de cultivo de 15.000 hectáreas).

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Es la mayor planta del mundo con doble uso, combina agua potable y regadío, y está liderada por Coxabengoa Water España. Se encuentra en la primera etapa de ejecución, y tiene 10.300 usuarios en una superficie de 11.800 hectáreas. Para ponerla en marcha, se han invertido 400 millones de euros, el 50% proviene de la administración pública y entidades financieras (39%), de capital de inversión (10%) y de agricultores (2%). 

En términos económicos, la desaladora de Agadir “será clave para dar impulso a sectores de la región como el agrícola, o el turístico, que se verán reforzados. Asimismo, promoverá la conservación de los acuíferos de la zona, ya que evitará su sobreexplotación, ayudando así a satisfacer, tanto las necesidades de agua para consumo doméstico, como las de riego”, afirmó José María Batanero Ortiz, director de Coxabengoa Water España en noviembre de 2023, durante la II edición de GeneraSur Summit.

Coxabengoa Water España surgió de la compra de la andaluza Abengoa por parte de Cox Energy y es líder mundial en desalación con proyectos como el Taweelah en Abu Dhabi con 909.218m3/día de capacidad de desalación. Es especialista en el diseño y la construcción de desaladoras, con más de 30 plantas en España, África, Latinoamérica, Estados Unidos, Asia y Oriente Medio, para la producción de agua potable o industrial, mediante procesos de membrana convencionales y avanzados, a partir de agua de mar o salobre. Actualmente, cuenta con una capacidad instalada de desalación de más de 4 millones de m3/día y 172.000 m3/día en construcción.

Por su parte, Marruecos cuenta con otras nueve plantas desalinizadoras más en fase de lanzamiento, que sumarán 352.600 m3/día para regadío. La de Casablanca la desarrolla la española Acciona con una inversión de 800 millones de euros y una capacidad diaria de 548,000 m3. 

Oportunidades para España

La presencia de estas empresas españolas en Marruecos refleja parte del compromiso español en fortalecer la seguridad hídrica y aprovechar las oportunidades comerciales en el mercado del agua. Debilidades, como la sequía, pueden convertirse en oportunidades para las compañías españolas en colaboración con el gobierno magrebí. En estos proyectos la financiación proviene de los sectores público y privado. Y es aquí donde España puede tener cabida. De la declaración conjunta firmada durante la Reunión de Alto Nivel (RAN) en febrero de 2023, se desprende que existe una colaboración estratégica bilateral en la lucha contra la sequía. 

Ese año, el Consejo de Ministros español aprobó un crédito de 5 millones de euros reembolsable para la instalación de plantas potabilizadoras en Marruecos. Además, se amplió hasta 800 millones de euros en líneas de crédito de empresas españolas que inviertan en el país vecino, sobre todo en las energías renovables, infraestructura, logística, el agua y la desalinización y la industria e innovación. 

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En Marruecos cada vez llueve menos y los niveles de sus embalses experimentan una reducción. De hecho, vive una de las sequías más graves de su historia, que ya alcanza a los últimos seis años. Según datos del gobierno marroquí, las lluvias han caído un 67% por debajo del promedio anual, y el agua en los embalses ha decrecido en un 66%. Junto a la falta de lluvia, la subida de las temperaturas ha intensificado la evaporación del agua almacenada. Todo esto significa una amenaza para la seguridad híbrida del país. Hay que tener en cuenta la unión de agua y alimentación, porque las condiciones climáticas adversas y la escasez del agua afectan directamente al sector agrícola en Marruecos, fundamental todavía para su economía.

Un informe de Alto Comisionado de Planificación (HCP, siglas en francés) señaló que el descenso en el valor agregado de la agricultura en el país magrebí se atribuye a la falta de agua y a las altas temperaturas. De ahí el desarrollo de proyectos gubernamentales de gestión integral del agua y de la dependencia de las organizaciones internacionales. El Banco Mundial y la Unión Europea juegan un papel importante con programas de financiación millonarios, que cubren la parte económica y técnica. De tal manera, que respaldan la implementación de su Plan Nacional de Agua 2020-2050 con tres objetivos: compensar el déficit hídrico, interconectar cuencas hidráulicas y explorar nuevas vías de gestión del agua.

En este sentido, Rabat ha anunciado varias estrategias, como la siembra de nubes o la construcción de autopistas del agua, aunque la prioridad actualmente es la desalación. De hecho, los planes del gobierno pasan por construir varias desaladoras. El objetivo para 2030 es que el 50% del suministro del agua potable llegue de procesos de desalinización para usos agrícolas y urbanos, algo que también necesitan para el turismo. 

Planta híbrida solargas

Igualmente, Coxabengoa opera en otros sectores en Marruecos. En diciembre de 2023, finalizó de forma exitosa las inspecciones mayores de las turbinas de gas de la central híbrida solargas de Ain Beni Mathar, en la provincia de Jerada, región oriental marroquí, con 472 MW de potencia. “En concreto, sustituyeron todos los álabes y diafragmas de las turbinas, realizaron los ensayos y verificaciones de todos los componentes críticos de turbina y generador en la central híbrida de ciclo combinado y campo solar (Integrated Solar Combined Cycle, o ISSC)”, explica la compañía en un comunicado. 

La preparación de estos trabajos comenzó dos años antes debido a los elevados plazos para algunos de los componentes necesarios. “La fecha definitiva se fija con un año de antelación, para así poder adecuar las necesidades del operador de red con la disponibilidad de los recursos altamente especializados y limitados necesarios para la misma”, detalla Coxabengoa.

Esta ocasión, además, “ha supuesto un desafío añadido, ya que, por necesidades del cliente y para asegurar el suministro eléctrico en un área muy importante de Marruecos, hubo que posponer las inspecciones a tan solo un mes del comienzo, originalmente previsto en septiembre”, revela.

El cliente marroquí, la Oficina Nacional de Electricidad y de Agua Potable (ONEE, en sus en francés), calificó como “excelente” la operación y mantenimiento de la planta, que por cuarto año consecutivo ha alcanzado una disponibilidad superior al 98%. La empresa española indica que “mostró su satisfacción por la calidad del trabajo y el compromiso demostrado una vez más por Coxabengoa”.