Las siderúrgicas se encaminan a un 2024 negro: caída de la producción, peores previsiones y un agujero de 450 millones
- Acerinox y Arcelor reducen a la mitad sus ganancias, mientras la patronal europea anuncia una nueva recesión de la demanda este año.
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El sector siderúrgico europeo atraviesa un momento crítico sin visos de mejora a corto plazo. Las continuas recesiones en la demanda de acero, la sobreoferta china y la drástica reducción de las ganancias de grandes empresas como Acerinox y ArcelorMittal no dan tregua.
Este mismo martes, la patronal europea de acero, Eurofer, alertó sobre "otra recesión" en 2024, tras recortar sus previsiones de consumo de acero. Hablamos de una caída estimada del 1,8% este año, revisando a la baja la mejora del 1,4% de la previsión anterior. Cabe señalar que venimos de dos retrocesos significativos: del 8,3% en 2022 y del 6% en 2023.
El empeoramiento de las perspectivas del sector coincidió con la presentación de resultados de Acerinox. La compañía reflejó en sus cuentas del tercer trimestre una reducción de su beneficio a la mitad, hasta los 162 millones de euros, precisamente debido a la "debilidad de la demanda" en sus principales mercados, Europa y Estados Unidos.
Y sus previsiones no son más optimistas para el cierre del año. "La debilidad en la demanda de acero inoxidable se mantiene de cara al cuarto trimestre. La estacionalidad propia de final de año y las incertidumbres geopolíticas y macroeconómicas no nos permiten ser optimistas en el corto plazo, pese a que el nivel de inventarios sigue siendo bajo", reconoció la compañía.
La tormenta también envuelve a ArcelorMittal. En la primera mitad del año recortó un 52% sus ganancias, hasta los 1.332 millones de euros, y lanzó advirtió sobre unas condiciones del mercado que son "insostenibles".
De hecho, la semana pasada las incertidumbres se trasladaron a España. La compañía con sede en Luxemburgo paró la acería y el tren de laminación de alambrón en Gijón por la falta de pedidos.
En un año, las principales acereras del Ibex 35 arrastran un agujero bursátil de 450 millones de euros. ArcelorMittal ha perdido cerca de 410 millones en capitalización y Arcerinox, casi 42 millones de euros.
El consumo de acero en la Unión Europa siguió disminuyendo un 1,3% en el segundo trimestre de este año, lo que confirma la tendencia negativa observada en el trimestre anterior (-3%), tal y como revelan los datos de la patronal.
La asociación advirtió que las graves consecuencias de la guerra en Ucrania y otras tensiones geopolíticas globales, junto con el deterioro de las perspectivas manufactureras en toda la UE y la incertidumbre en el entorno económico general, "han seguido pasando factura."
En 2024, se prevé que el crecimiento de los sectores que utilizan acero caiga más drásticamente de lo estimado anteriormente, un 2,7% frente al 1,6% anterior, debido a la segunda recesión consecutiva en el sector de la construcción y la primera (desde 2020) en el sector automotriz.
Más a largo plazo, para 2025, se prevé una recuperación modesta, pero que dará lugar a volúmenes de consumo muy por debajo de los niveles anteriores a la pandemia.
Menos producción y más despidos
Según Eurofer, la producción de acero en la UE se ha reducido en más de un 30% desde 2008, hasta 126 millones de toneladas en 2023. Los procesos de reestructuración y reducción de capacidad han provocado una pérdida de casi 100.000 puestos de trabajo en la industria siderúrgica europea en los últimos 15 años.
La situación se ve tensada por la sobreproducción de China. Y es que una caída de la demanda muy superior a la de la oferta en el país ha lastrado los precios del acero y está perjudicado la rentabilidad de los fabricantes, algunos de los cuales han enviado más cargamentos al extranjero.
La Asociación China del Hierro y el Acero (CISA, por sus siglas en inglés), respaldada por el gobierno, informó la semana pasada que el consumo de acero en China durante los tres primeros trimestres de 2024 disminuyó un 6,2% interanual, alcanzando los 688 millones de toneladas métricas.
En una publicación adicional, la CISA anticipó que el consumo de acero probablemente se mantendrá por debajo de los 900 millones de toneladas este año y en torno a los 800 millones de toneladas hasta el año 2035.
El exceso de capacidad siderúrgica mundial alcanzó los 551 millones de toneladas en 2023 (cuatro veces más que la producción anual de acero de la UE) y sigue creciendo. Según la OCDE, se prevé que se produzcan 157 millones de toneladas adicionales de capacidad, principalmente con un alto nivel de emisiones de carbono, de aquí a 2026.