La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Sara Aagesen.

La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Sara Aagesen. Joaquin Corchero / Europa Press

Observatorio de la Energía

Nuevo golpe a las energéticas: el Gobierno sube un 40% las aportaciones que tienen que hacer al Fondo de Eficiencia

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Nuevo golpe a Repsol, Moeve (Cepsa), Iberdrola, Endesa y Naturgy. El Gobierno elevará casi un 40% las contribuciones que eléctricas, gasistas y petroleras deberán hacer al Fondo Nacional de Eficiencia Energética (FNEE) en 2025.

Así lo muestra la propuesta de orden que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha sacado a audiencia pública hasta el viernes 17 de enero. En ella, el departamento de Sara Aagesen incrementa el coste de las aportaciones que el sector debe realizar desde los 795 millones de 2024 hasta los 1.100 millones de euros para 2025.

Esta cifra es casi tres veces superior a la de 2023 y casi seis veces superior a la de 2022. Además, este incremento se produce en un momento de fuertes tensiones entre los gigantes del sector y el Gobierno, después de que este lunes el último Consejo de Ministros aprobase en el nuevo gravamen energético.

¿Qué es el FNEE?

El Fondo Nacional de Eficiencia Energética (FNEE) fue creado en España en 2014 para cumplir con la Directiva 2012/27/UE de la UE, que establece metas de ahorro energético. El FNEE financia programas de I+D, prácticas sostenibles y capacitación en eficiencia energética y son las empresas energéticas, llamadas sujetos obligados, las que deben aportar anualmente una cuota según su volumen de ventas. Desde 2024, en lugar de realizar una aportación económica, pueden cumplir su obligación comprando y liquidando Certificados de Ahorro Energético (CAE).

Al igual que ocurre con el conocido como impuestazo, en el Fondo Nacional de Eficiencia Repsol es el grupo que hace las mayores aportaciones. En concreto, para el año 2025 deberá aportar al fondo más de 243 millones de euros, un 37% más que en 2024.

Le siguen Endesa, con una contribución de 128 millones de euros (+32% que este año), y Moeve, con 113 millones (+33%).

Destaca el incremento de las contribuciones para Iberdrola. La compañía capitaneada por Ignacio Galán elevará un 40% sus aportaciones en 2025, hasta casi 84 millones de euros. Naturgy pondrá más de 80 millones (un 19% más); BP, más de 47 millones (un 14% más); y Galp, casi 31 millones (un 20% más).

En conjunto, estas grandes empresas son las que aportan cerca del 70% de la contribución necesaria para el fondo.

Según reza en la documentación aportada por el Ministerio, para el año 2025, se ha fijado un objetivo de ahorro de energía final dentro del Sistema Nacional de Obligaciones de Eficiencia Energética de 500 ktep (kilotoneladas equivalentes de petróleo) o 5.815 GWh (gigavatios hora).

En términos financieros, se ha establecido una equivalencia para el año 2025, que es de 2,20 millones de euros por cada ktep ahorrado. Esto significa que, para alcanzar el objetivo de ahorro de energía, se necesitaría movilizar una inversión de 2,20 millones de euros por cada ktep. Asimismo, esto equivale a 189.165,95 euros por cada GWh ahorrado, basándose en el coste medio estimado para implementar las inversiones necesarias en todos los sectores de actuación. 

La ventaja de los CAE

Cabe señalar que el incremento del coste del FNEE viene acompañado de un aumento de la cuota de aportaciones que se pueden cubrir con los Certificados de Ahorro Energético (CAE)

El Gobierno elevará el porcentaje máximo a deducir con estos certificados del 65% que había en 2024, hasta el 85%. De este modo, las energéticas podrán compensar hasta unos 935 millones de euros con aportaciones de estos CAE. 

Si una empresa no puede generar suficientes certificados por sí misma, puede comprar CAE a otras empresas que sí hayan logrado esos ahorros. Y es aquí donde surge un mercado de certificados de ahorro.

Por ejemplo, si una empresa de gas no ha logrado ahorrar toda la energía que se le exige, puede comprar los CAE generados por una fábrica de zapatos que ha actualizado sus máquinas para ser más eficientes. Esta fábrica, al reducir su consumo energético, ha generado una cantidad de CAE que puede vender. 

Este sistema comenzó a aplicarse en 2024 con el objetivo premiar el ahorro de energía. Hasta el momento, en este primer año de aplicación de los CAE, se han certificado más de 600 actuaciones de eficiencia energética que juntas han logrado superar los 1.800 GWh de ahorro energético.

Este ahorro se traduce en un equivalente financiero superior a los 300 millones de euros, que deben ser aportados al Fondo Nacional de Eficiencia Energética, frente a los 517 millones que el sector podía cubrir con CAE en 2024.