La Policía Nacional y Orange han lanzado la campaña 'Por un uso Love de la tecnología', cuyo objetivo es advertir de los riesgos que puede suponer para los más jóvenes seguir la moda de los retos virales, cuando estos les exponen a situaciones extremas, según han informado los impulsores de esta iniciativa.
Para llamar la atención y advertir sobre este peligroso fenómeno, Orange, con la colaboración de la Policía Nacional, han publicado un vídeo de ficción, a modo de historia, que pretende generar interés y que surjan esas conversaciones de valor entre padres e hijos sobre el impacto que la situación en él retratada les produce; y un vídeo realista en el que participan adultos y menores reales a los que se enfrenta a una situación en torno al fenómeno del mes para que comprendan sus secuelas.
Estos contenidos audiovisuales se complementarán en próximas semanas con campañas online y otros contenidos informativos con consejos y mensajes de expertos y educadores para reforzar el carácter didáctico de la iniciativa.
Los retos virales pueden ser cómicos o inocentes como el llamado '10 Years Challenge', en el que se comparan fotos de hace años con otras de la actualidad; y otros nacen con un fin solidario, como el 'Ice Bucket Challenge', en el que sus protagonistas, incluidos personajes famosos, se echaban cubos de agua helada para concienciar sobre la ELA.
Sin embargo, Orange alerta de que en los últimos tiempos la gran mayoría de los retos "rozan lo absurdo y conllevan un riesgo para las personas".
Es el caso del denominado 'In My Feelings Challenge', que incita a bajarse de un coche en marcha y bailar; la 'Ballena Azul', una secuencia de retos cuya culminación es el suicidio de sus protagonistas; 'Momo', que obliga a seguir las peligrosas indicaciones de una extraña figura recibida por WhatsApp bajo la amenaza de caer en una maldición si no se lleva a cabo; o el más reciente "Bird Box Challenge", que consiste en salir a la calle con los ojos vendados.
Según el informe 'Digital In 2019' elaborado por We Are Social en colaboración con Hootsuite, Facebook rozaba a finales de enero de 2019 los 2.300 millones de usuarios en el mundo, YouTube contaba con 1.900 millones de seguidores e Instagram superaba los 1.000 millones.
Además, las herramientas de mensajería WhatsApp, Facebook Messenger o WeChat, contabilizaban todas ellas más de 1.000 millones de usuarios, con Tik Tok alcanzando ya los 500 millones. En España, esta misma encuesta revela que Facebook tiene ya 24 millones de usuarios activos mensuales e Instagram 15 millones.
CONSEJOS
Durante la presentación de la campaña, Orange y la Policía Nacional han compartido algunos consejos y orientaciones para jóvenes, padres y tutores sobre la mejor forma de evitar una situación de riesgo derivada de un desafío viral, destacando la confianza y la comunicación como las principales herramientas de prevención.
En concreto, han aconsejado supervisar el tipo de contenidos a los que acceden los hijos en Internet; observar lo que publican en sus perfiles y si tienden a imitar la conducta de otras personas; o conocer los influencers a los que siguen y si estos plantean retos o publican fotografías o vídeos de los mismos.
En caso de detectar que alguien propone un desafío viral que pudiera ser peligroso para niños y adolescentes, se debe comunicar y reportar en la red social o espacio correspondiente y alertar, en caso necesario, a las Fuerzas de Seguridad del Estado.
Asimismo, han recomendado pactar con los menores unas normas de uso responsable, inteligente y respetuoso de los ordenadores, tabletas o smartphones; advertirles de los riesgos que entraña compartir datos personales con otros usuarios online; o trabajar su autoestima para que sepan gestionar la opinión de los demás son otras pautas básicas para prevenir las consecuencias negativas de ciertos comportamientos en la Red.
"La meta que nos hemos propuesto es acabar con los daños causados con motivo de los retos virales que circulan por internet y que ponen en peligro no solo la salud, sino la propia vida de nuestros menores", ha indicado el director de la Policía, Francisco Pardo.