El primer día de confinamiento obligado en toda España no ha sido fácil para Amazon. El gigante logístico mantiene los envíos e intenta -dentro de la excepcionalidad del coronavirus- cumplir con los tiempos de entrega.
No obstante, este lunes las quejas se agolpaban, los tiempos de entrega se retrasaron y algunos productos escasearon. De hecho, obtener alimentos frescos era casi imposible y otros muy demandados como el papel higiénico eran inalcanzables.
Del mismo modo, la entrega Prime -48 horas- no funcionaba para un buen puñado de artículos y otros tantos retrasaban sus tiempos habituales de entrega. Una situación que la propia compañía ha reconocido a Invertia por el "aumento exponencial en el número de compras online".
"A corto plazo, esta situación está impactando en nuestro servicio a clientes. En particular, actualmente se han agotado las existencias de algunas marcas y artículos populares, especialmente en las categorías de productos básicos para el hogar; y algunos de nuestros plazos de entrega son más largos de lo habitual", dice Amazon.
Control del aumento de precios
No obstante, la compañía indica que están trabajando para solventar estos inconvenientes. "Estamos trabajando las 24 horas con nuestros colaboradores comerciales y las pymes que actualmente venden a través del servicio de Amazon Marketplace para garantizar la disponibilidad de todos nuestros productos y ofrecer más apoyo para entregar todos los pedidos".
En términos generales Amazon indica que son conscientes de la situación de emergencia y que el servicio que presta el gigante digital es de utilidad pública. "Nuestro papel al servicio de los clientes y la sociedad en estos momentos es fundamental, y queremos asegurarnos de que las personas puedan recibir los artículos que necesitan, cuando los necesitan", dice un portavoz de la compañía a Invertia.
A nivel internacional, la empresa está trabajando para garantizar que nadie aumente artificialmente los precios de los productos básicos durante esta pandemia y han mejorado sus procedimientos de limpieza diaria e implementando una limpieza nocturna adicional.
Respecto a los trabajadores infectados -algunos en España- indican que les mantienen en cuarentena y que nadie de su plantilla de centros logísticos estará expuesto a la enfermedad dentro de sus instalaciones. Una decisión clave para el funcionamiento de la compañía que en España tiene más de 5.000 empleados.