Amazon se prepara en España para la "nueva normalidad", un periodo que comenzará a rodar a finales de junio si sigue cayendo el número de contagios, pero que presenta múltiples interrogantes como la circulación de personas y su relación con el gran comercio.
Los mensajes de las autoridades llaman a la cautela en un escenario de "distanciamiento social" del que el gigante de la distribución puede sacar tajada, para hacerse fuerte en la entrega a domicilio en productos que tradicionalmente se han adquirido en los centros comerciales.
Los expertos coinciden en señalar que en esta nueva normalidad nada volverá a ser como antes y costará que los españoles vuelvan a comprar en lugares de afluencia masiva de público, ante lo que el comercio electrónico se convertirá -como durante en todo el confinamiento- en el principal motor del consumo.
En este nuevo escenario Amazon quiere salir reforzado y, para ello, ya prepara sus armas, reforzando sus plantillas y preparando una campaña de "máximo nivel comercial" para todo el año.
En lenguaje del gigante de la distribución esto es tener un Black Friday y una campaña de Navidad -sus momentos de mayores ventas del curso- permanente de aquí a finales de 2020. Esto implica contratar más trabajadores temporales y reforzar su estructura.
Protocolos sanitarios
Esta estrategia además se verá reforzada por la pax social que ha logrado Amazon en España con los trabajadores del centro logístico de San Fernando de Henares en Madrid. Después de varias semanas de disputas sindicales ha logrado llegar a acuerdos respecto de sus protocolos de seguridad sanitaria para proteger a la plantilla frente a eventuales contagios de coronavirus.
Desde el comienzo del estado de alarma -y con Amazon y el comercio electrónico como servicio esencial- los trabajadores del gigante tecnológico criticaron las medidas adoptadas denunciando a la empresa hasta en tres ocasiones a la Inspección de Trabajo. Finalmente, las autoridades realizaron una revisión de sus instalaciones y después de muchos documentos cruzados se llegó a un acuerdo con la plantilla.
Frente a esto y ante unos meses que se anticipan de gran nivel de trabajo, hay trabajadores que siguen pensando que Amazon no debería intentar abarcar demasiado ni embarcarse en campañas a máximo rendimiento. Indican que será muy difícil garantizar la seguridad de un crecimiento explosivo de la plantilla sin poner en riesgo los protocolos acordados recientemente.
Hasta ahora se han contratado a unas 1.500 personas extra en un centro logístico para soportar picos de crecimiento de hasta el 50% en algunos días durante el confinamiento. El objetivo es seguir aumentado la plantilla de aquí a fin de año en previsión de que el crecimiento de los pedidos siga siendo de dos dígitos.
El megacentro de San Fernando tiene 70.000 metros cuadrados -equivalente a 11 campos de fútbol- y llega a almacenar hasta 32 millones de productos. Todo ello antes de decretarse el estado de alarma.