Las redes están y las infraestructuras son de primer nivel. Ahora solo falta potenciar la educación y la formación digital en profesionales, grandes corporaciones, pero en especial en pequeñas empresas, para que España pueda aprovechar todo su potencial para recuperar y reconstruir su tejido social y productivo cuando pase el riesgo sanitario de la pandemia del coronavirus.
Ésta es la principal conclusión del informe Sociedad Digital en España 2019 (sdiE 2019) elaborado y presentado por Fundación Telefónica este jueves. Por primera vez y por las circunstancias de confinamiento, el documento ha sido presentado de manera virtual a cargo de Carmen Morenés, directora general de la Fundación y Pablo Gonzalo, responsable de Cultura Digital y Espacio Fundación Telefónica.
Nunca en la historia de la humanidad la sociedad había sido tan consciente del uso de las tecnologías ni se había realizado un consumo tan intensivo de las redes de telecomunicaciones. De hecho, este informe constata que la emergencia mundial generada por el Covid-19 ha supuesto un punto de inflexión y un desafío para la humanidad que solo podrá ser superado con éxito gracias al uso de las herramientas digitales.
"Ante esta situación, gobiernos, empresas y ciudadanos se están viendo obligados a cambiar la manera de educarse, de trabajar, de entretenerse, y, sobre todo, de comunicarse. Ahora, estar conectados cobra más relevancia que nunca para que todos seamos capaces de avanzar hasta una completa digitalización", ha indicado Carmen Morenés.
En este sentido, según el sdiE 2019, España progresa en su transición digital y se encuentra a la cabeza en conectividad con infraestructuras de primer nivel. Tres de cada cuatro hogares tienen cobertura de fibra óptica y nueve de cada diez españoles son usuarios de Internet. El informe ha puesto énfasis en que a diferencia de anteriores revoluciones industriales como país por primera vez estamos liderando las infraestructuras lo que nos pone en la vanguardia de futuros desarrollos digitales.
Industria rezagada
De esta manera, en 2019 España ocupaba el undécimo puesto en la lista de los veintiocho estados miembros de la Unión Europea en el DESI (Índice de la Economía y la Sociedad Digitales) y superaba varios puntos la media.
Además, el acceso a internet de los españoles es ya generalizado: 9 de cada 10 ya son usuarios y la conexión a las redes es ultrarrápida: 3 de cada 4 hogares tienen cobertura de fibra óptica. Esta tecnología de banda ancha es la que más está creciendo, ha pasado del 63% al 77% en dos años. Esta penetración sitúa a España en el primer lugar en cuanto a cobertura y clientes de fibra óptica en Europa.
Del mismo modo, un futuro próximo nos trae la tecnología 5G con redes más rápidas, mucho más seguras, mucho más simples, con menor latencia y más inteligentes. Actualmente hay 7.000 millones de aparatos conectados, cifra que se espera supere los 21.500 millones en 2025.
No obstante, la transformación digital siguen pendiente en la industria. En este punto, España supera la media europea, aunque está lejos de ser líder. Según estudio de PwC Industria 4.0 Global Digital Operations Study 2018, que 2 de cada 3 empresas españolas se están quedando rezagadas en el proceso de digitalización, y solamente el 20% de sus ingresos procede de productos y servicios digitales.
El informe advierte que acelerar esta digitalización para las PYMES y los Autónomos puede contribuir, tras el Covid, a hacer que repunte la economía y contribuir a crear empleo en uno de los sectores más castigados junto al turismo y los servicios. La reinvención digital de España podría tener un impacto que podría alcanzar un valor anual equivalente al 1,8% del PIB hasta 2025.
Inteligencia artificial
Pero para lograr esta digitalización, la formación en competencias digitales de los españoles se presenta como una oportunidad. En nuestro país, poco más de la mitad de las personas entre 16 y 74 años poseen capacidades digitales básicas. Según el indicador DESI, España se sitúa en el puesto 17 en la dimensión de capital humano, 3,5 puntos por debajo de la media europea.
A pesar de estos bajos niveles, la tendencia parece positiva y los usuarios con capacidades digitales avanzadas habrían pasado del 32% de la población en 2017 al 36,1% en 2019. También aumentan los usuarios con capacidades digitales básicas (del 28% al 32%), fundamentalmente por la incorporación de nuevos usuarios de internet.
¿El futuro? Según el informe, la Inteligencia Artificial se ha convertido en la tecnología más disruptiva llamada a revolucionar todos los sectores de la sociedad. Sus aplicaciones abarcan desde la compra on line a servicios de diagnóstico y tratamiento de enfermedades hasta el auge del uso de la voz en dispositivos electrónicos.
Pero, según el sdiE 2019 nada de esto posible sería posible sin una perspectiva humanista del uso de la tecnología. La Fundación Telefónica ha vuelto a recordar que es necesario un nuevo contrato social entre gobiernos, empresas y sociedad civil para que nadie se quede atrás. "Telefónica es consciente de las oportunidades que ofrece esta revolución digital y, a través de su Manifiesto Digital, se compromete a trabajar de manera ética para mejorar la vida de las personas con la tecnología", han indicado.
Y es que en definitiva, cada vez son más los españoles que confían en Internet (43%), una confianza que ha dado un salto acelerado a raíz de la crisis del Covid-19. El ocio digital se convirtió en 2019 en la principal palanca de crecimiento de la Red, donde destacó el negocio del videojuego y el auge de los abonados a la televisión de pago. Ambos son un reflejo de una sociedad española cada vez más digital, pero que a su vez debe seguir avanzando más en competencias digitales para "consolidar el salto económica que necesita el tejido productivo español".