Orange España ha comunicado este viernes formalmente a la representación legal de los trabajadores la intención de llevar a cabo un plan de ajuste de empleo que afectará como máximo a 485 puestos de trabajo.
Los últimos datos indican que la operadora tiene unos 5.700 trabajadores en España, por lo que el ERE comunicado representaría un 8,5% total de la plantilla en nuestro país.
No obstante, si descontamos tiendas propias y plataformas y solo bajo la sociedad afectada por este ERE, Orange Espagne, se llegaría a los 3.000 empleados, con lo que la cifra de salidas se elevaría al 15% del total.
La compañía ha informado de que convocará a sus sindicatos en los próximos días a una primera reunión para iniciar la negociación sobre la forma en que dicho proceso se va a llevar a cabo.
El ERE se justifica, según la compañía, porque el sector de telecomunicaciones "lleva años encadenando pérdidas de ingresos como consecuencia de la hipercompetitividad del mercado y la multiplicidad de actores low cost. Esto plantea un gran reto para la compañía que lleva más de 20 años asumiendo inversiones intensivas y que necesita seguir haciéndolo en un entorno de transición tecnológica".
"En este contexto, para garantizar la competitividad de la compañía, resulta imprescindible adaptar la operación a estos cambios estructurales".
Mayo y junio
"Este proceso se desarrollará durante los meses de mayo y junio y, la compañía, tal y como está haciendo hoy, informará sobre los hitos y los acuerdos alcanzados, preservando siempre el respeto al proceso negociador con la representación legal de los trabajadores que hoy se inicia", han indicado.
La operadora ha acusado los malos datos operativos de los últimos dos años. Entre enero y marzo la compañía registró unos ingresos de 1.188 millones de euros, un 7,4% menos respecto de igual periodo del año anterior. En cuanto a ingresos minoristas, la caída es aún mayor con un 10,2% de retroceso hasta los 818 millones.
Orange España explicó estos números por "el impacto de la modificación de precios de la base de clientes existente en el segundo semestre de 2020". Por otro lado, han agregado que el reposicionamiento de nuestras ofertas "se tradujo en un positivo comportamiento comercial en España por tercer trimestre consecutivo, con 10.000 altas netas en servicios convergentes, 49.000 en fibra y 24.000 en contratos móviles excluyendo M2M".
Precisamente, tras la presentación de estos resultados la compañía indicó que tenía todas las opciones abiertas de cara a un escenario con caída de ingresos durante este año y, posiblemente en 2022, si es que no mejora la situación económica y de la pandemia. Así lo indicó su CEO, Jean-François Fallacher, durante la rueda de prensa de presentación de resultados trimestrales.
Ante la pregunta sobre posibles ajustes de plantilla, un escenario de caída de ingresos y aumento de las inversiones, Fallacher indicó que tenían todas las opciones sobre la mesa, aunque acto seguido indicó que España sigue siendo un mercado estratégico para el grupo en el que seguirán invirtiendo.
Caída de 2020
Con todo, lo cierto es que la guerra comercial sigue pasando factura a las compañías españolas recortando ingresos y aumentando los gastos. Una situación compleja de cara al desplegue de las nuevas redes de 5G.
Durante 2020 Orange España cerró un año convulso con retrocesos en todos sus parámetros económicos. Una caída del 13% en sus resultados operativos (Ebitda) hasta los 1.433 millones y un retroceso de sus ingresos del 5,9% hasta 4.951 millones.
La compañía bajó la barrera psicológica de los 5.000 millones por el impacto de la Covid en sus negocios, pero además por la guerra comercial que le arrebató clientes y que le obligó a aumentar sus costes en promociones. En definitiva, un mercado deflacionario que ha cortado la racha positiva de la compañía en los últimos cinco años.